El mando a distancia más universal

Unos pequeños receptores se encargan de transformar la señal en una de infrarrojos, reconocible por la mayoría de sistemas. Para hacer su uso aún más fácil, dispone de una pantalla táctil a color de 2,2 pulgadas. Así se puede acceder directamente a todas las actividades, como "ver TV" o ?escuchar música? simplemente pulsando sobre ella. Además, los botones disponen de retroiluminación para poder usarlo en la oscuridad. Claro que no todo es tan tan bueno. El precio que hay que pagar por ganar espacio, cambiar de canal desde la terraza y, en definitiva, tener una mejor relación con la tecnología es de 399 euros.