Cómo conectar el módem al router
Un router puede convertirse en una excelente opción para conseguir extender y amplificar nuestra conexión a Internet, siendo todavía más útil cuando, por ejemplo, disponemos de un router inalámbrico. Te explicamos de qué forma puedes conectar un módem a tu router fácilmente y en pocos minutos.
Utilizar un router puede convertirse en una opción excelente a la hora de ampliar la conexión a Internet de nuestro hogar. Y es que puede ser de muchísima utilidad a la hora no solo de ampliar los puertos con los que conectar diferentes aparatos y dispositivos (como por ejemplo el ordenador o el televisor), sino que si optamos por un router inalámbrico dispondremos, además, de conectividad Wi-Fi.
Se trata, como es de imaginar, de una opción bastante interesante, sobre todo cuando, por ejemplo, disponemos de una casa bastante grande, o de diferentes plantas, y deseamos expandir la conexión de banda ancha o de fibra a través de cable.
Así, si disponemos, por ejemplo, de un módem principal instalado en la planta de abajo, podemos llevar un cable de Ethernet desde este hasta el router inalámbrico (que, por ejemplo, hemos situado en la planta de arriba), y de esta manera dispondremos de prácticamente la misma conexión que en la planta inferior, con la diferencia de que, además, tendremos conexión inalámbrica y muchos más puertos LAN a los que conectar nuestros dispositivos.
Pero, ¿de qué manera podemos conectar el módem al router? Te explicamos todo lo que necesitas saber, paso a paso.
Conectando nuestro módem al router
Lo cierto es que se trata de un proceso más sencillo de lo que posiblemente puedas pensar en un primer momento. Y para hacerlo necesitamos evidentemente un módem y un router, además de un cable de Ethernet, que será el que utilicemos para conectar el router al módem.
El proceso es tan sencillo como conectar un extremo del cable Ethernet al módem y el otro extremo a algunos de los puertos del router (habitualmente lo más aconsejable es hacerlo en el puerto número 1).
Ahora enchufamos el router a la corriente eléctrica y, después de entre 2 a 3 minutos, las luces del router empezarán a iluminarse, lo que indicará que el router se ha conectado correctamente.
Una vez hecho esto, apagamos nuestro ordenador (en caso de que lo tengamos encendido), y una vez apagado conectamos un cable Ethernet al mismo. Para terminar, conectamos el otro extremo del cable a uno de los puertos libres del router.
Finalmente, encendemos el ordenador. Casi de manera inmediata el ordenador detectará automáticamente que nos encontramos conectados a Internet.
Eso sí, ten en cuenta que esta opción no es válida cuando utilizas un módem o enrutador de algún operador como Movistar o Vodafone, en cuyo caso sería necesario seguir otros pasos que te explicaremos detalladamente próximamente.