Naves espaciales y escasez de microchips: estas serán las tendencias tecnológicas de 2022
Esto es lo que nos espera este año a nivel tecnológico.
El sueño de Elon Musk de ir a Marte podría dar un gran salto hacia adelante en los próximos meses, cuando su empresa SpaceX intente poner su aeronave Starship en órbita por primera vez. Será el cohete más poderoso jamás lanzado a la órbita, capaz de generar más del doble de energía de empuje que el cohete Saturno V, que llevó a los astronautas a la Luna hace medio siglo.
SpaceX ha gestionado varios vuelos de prueba suborbitales y Musk espera que el primer vuelo orbital, que realizará Starship SN20, sea en febrero. "Hay mucho riesgo asociado con este primer lanzamiento, por lo que no diría que es probable que tenga éxito, pero haremos muchos progresos", dijo Musk en un foro de científicos espaciales el pasado mes de noviembre.
Regreso al espacio
El vehículo es un cohete de dos etapas, la parte inferior es un potente propulsor llamado Super Heavy, en la parte superior se encuentra una nave espacial de 50 metros de altura llamada Starship; puesto todo fila, el conjunto supera los 120 metros de altura, como un edificio de 30 plantas. SpaceX ha desarrollado su propio motor llamado Raptor y 29 de ellos impulsarán al Super Heavy, mientras que la aeronave Starship tendrá seis motores. Ese poder de propulsión le permitirá transportar hasta 100 toneladas de carga al espacio.
Aún faltan chips
Si has tenido que esperar mucho tiempo para recibir tu coche nuevo o tu PlayStation, entonces has sufrido en tus propias carnes la etapa más dura de una escasez global de microchips y semiconductores de la historia reciente.
Esta escasez ha sido una gran frustración para la industria de la tecnología durante todo el 2021, y se espera que continúe durante 2022. La pandemia interrumpió la producción de chips de ordenador y causó problemas de envío. Mientras tanto, algunas empresas de electrónica cerraron líneas de producción que solo eran rentables marginalmente. Sin embargo, al mismo tiempo la demanda de dispositivos que incluyen estos microchips aumentó a medida que los consumidores, encerrados en casa a causa de las restricciones por la pandemia de coronavirus, compraban dispositivos electrónicos.
La combinación ha creado una grave escasez y los analistas dicen que no hay una solución inmediata. El equilibrio entre la oferta y la demanda probablemente no se recuperará pronto, probablemente hasta bien entrado el 2022. Las empresas están invirtiendo mucho dinero para satisfacer la demanda, pero se necesita mucho tiempo para poner en funcionamiento nuevas líneas de producción.
Incluso cuando los fabricantes de microchips se pongan al día con la demanda, a los fabricantes de automóviles y de dispositivos electrónicos les llevará quizás otros dos o tres meses aumentar su producción hasta alcanzar el ritmo previo a la crisis.
Esta escasez de semiconductores y microchips está haciendo que para muchas industrias la producción sea totalmente impredecible, y se están experimentando retrasos en las entregas de varios meses, y el encarecimiento de los productos electrónicos debido a los enormes problemas para poder satisfacer toda la demanda a un nivel planetario.