Esta es la razón por la que Yahoo ha tenido que abandonar China
La compañía se ha visto obligada a salir del mercado del gigante asiático.
Yahoo se ha convertido en la última empresa de tecnología estadounidense en poner fin a su presencia en la China continental, ya que allí se imponen regulaciones mucho más estrictas. La compañía aseguró, a través de un comunicado, que su decisión se debe a un "entorno comercial y legal cada vez más desafiante" en el país asiático.
A los usuarios de Yahoo en China ahora les aparece un mensaje que dice que las páginas web que han buscado ya no son accesibles. La compañía también ha asegurado que los productos y servicios de Yahoo no se ven afectados en otras partes del mundo.
Unas regulaciones legales y comerciales cada vez más estrictas
En el documento facilitado a los medios de comunicaciión, Yahoo asegura que "sigue comprometido con los derechos de nuestros usuarios y con una Internet libre y abierta. Agradecemos a nuestros usuarios por su apoyo". La medida de Yahoo sigue de cerca el anuncio de Microsoft el mes pasado de que eliminaría LinkedIn, su red social centrada en los negocios, de China, algo que también atribuyó a "un entorno operativo significativamente más desafiante y mayores requisitos para el adecuado cumplimiento de las funciones de nuestra empresa".
China se encuentra en medio de una ofensiva a gran escala contra las grandes empresas tecnológicas de occidente, sobre todo las que tienen su matriz en los Estados Unidos, ya que ambos países mantienen una soterrada guerra económica que dura ya varios años, con prohibiciones de productos y disparatados aranceles.
Una serie de leyes aprobadas en los últimos años contribuye a lo que Yahoo y otros caracterizan como un mercado desafiante para desarrollar una adecuada actividad empresarial. La Ley de Protección de la Información Personal, o PIPL, que entró en vigor el 1 de noviembre, es una de ellas.
Amenazas y multas exageradas
Diseñada como una ley de protección de datos china, introduce una serie de regulaciones sobre cómo se pueden recopilar y almacenar los datos, con la amenaza de multas desorbitadas de hasta el 5% de la facturación anual de una empresa (el 5% de la facturación anual Microsoft, por ejemplo, son varios cientos de millones de euros).
Las entidades extranjeras que procesan la información del usuario, como a través de cookies y servicios web, deben tener presencia o designar a un representante en la China continental, responsable de la aplicación. De alguna manera, no es diferente de las leyes centradas en la privacidad, como el GDPR en Europa. Pero el entorno político es significativamente diferente en China del de muchas naciones occidentales, con estrictos requisitos de censura.
Algunas empresas de tecnología occidentales han sido criticadas por tener vínculos con China o por almacenar allí datos de usuarios. Incluso las empresas chinas están sufriendo los efectos de una represión tecnológica mucho más amplia, parte de un plan de cinco años del estado para regular su economía.
Por ejemplo, la minería de Bitcoin ha sido devastada por una prohibición general del comercio de criptomonedas, mientras que Alibaba recibió una multa récord de 2.800 millones de euros a principios de este año.