¿Eres adicto al sol?
El abuso del bronceado puede acarrear comportamientos poco saludables, no solo para la salud de la piel, sino también con respecto a la salud mental. Si quieres saber si tu relación con el sol es saludable, no te pierdas este test.
El Sol (con mayúscula, entendido como el astro que preside nuestro sistema solar) es quizás el elemento natural más importante junto con la propia Tierra, porque es su gravedad la que sustenta a nuestro planeta y al resto de ellos, y es su energía la que posibilita la vida. Sin embargo, la radiación que produce nuestro astro (fotones que llegar a la Tierra en un viaje de ocho minutos desde su superficie, generados por fusión nuclear en el interior de su núcleo), si bien llega hasta nosotros en forma de luz y calor, puede llegar a ser peligrosa para los seres vivos si nos exponemos demasiado a ella.
La radiación solar es ultravioleta (UV), y ese tipo de radiación tiene la capacidad de penetrar en nuestras células, con la potencialidad de inducir cambios en nuestro ADN, pudiendo producir varios tipos de cáncer de piel. Otro tipo de radiaciones no tienen esta capacidad, como la radiación de los móviles o la radiación del WiFi, o del microondas, que tan solo calientan los átomos por fricción, además de que el ser humano se expone a ellas a muy baja frecuencia.
Para evitar los daños producidos por la radiación solar, la Tierra cuenta con algunas estrategias. Por ejemplo, la capa de ozono absorbe la radiación más perjudicial. Pero, aun así, una alta exposición al sol puede conllevar serios problemas de salud.
La tanorexia puede definirse como la adicción al bronceado: una persona con tanorexia nunca se vería a sí misma lo suficientemente morena, y necesitaría continuar con sus hábitos con el sol aun cuando estos sobrepasen los límites de lo saludable. Si bien no está recogida como tal en el Manual Diagnóstico de Enfermedades Mentales (DSM 5), la tanorexia es una condición descrita desde hace años por muchos académicos. De hecho, algunos profesionales de la psicología lo catalogan como un tipo de trastorno dismórfico corporal. Otros, lo sitúan cerca de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) por presentar algunos aspectos conductuales y psicológicos comunes.
¿Cómo es una persona con tanorexia?
Las personas con adicción al bronceado suelen presentar irritabilidad si no pueden tomar el sol; compiten con otras personas de su entorno por ver quién está más bronceado; suelen experimentar una distorsión de la realidad, al creer que su piel no está nunca lo bastante morena; suelen tener baja autoestima, y presentan una sensación de ansiedad o miedo ante la idea de perder el bronceado. Además, la adicción al bronceado suele acarrearles problemas personales, como el descuido de responsabilidades personales, sociales o laborales. Por último, el exceso de sol suele provocarles problemas cutáneos, como algunos tipos de cáncer de piel, manchas que cambian de aspecto, o envejecimiento prematuro.
Si quieres saber si tu relación con el sol es saludable, responde con sinceridad a todas las preguntas de este test, que te permitirá obtener una pista. Si consideras que tu resultado no es compatible con la salud, te recomendamos consultar a un especialista.

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Cada año tras las vacaciones, al volver a ver a familiares, amigos o compañeros de trabajo, el comentario que más frecuentemente sueles escuchar es:

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En verano, una de las cuestiones estéticas que más te preocupa es

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¿Sueles usar productos que favorezcan el bronceado?

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Tu piel presenta alguna mancha o lunar cuya presencia no te resulta familiar. Tú...

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Has organizado una excursión en el campo o en la playa, pero despiertas el día previsto y te das cuenta de que está nublado

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Comienza el otoño, vuelve la rutina de trabajo, y se acaban las salidas bajo el sol. Cada año, tú...

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Tras la vuelta a las actividades cotidianas después del verano, te das cuenta de que algunas personas de tu entorno están realmente morenas.

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Elige un destino vacacional:

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Estás disfrutando de una relajante sesión de bronceado en tu terraza, pero de pronto tu teléfono suena para recordarte una cita con amigos

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Durante una revisión médica, el especialista te advierte de que debes evitar broncearte en las horas centrales del día. Tú...

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Tus amigos, pareja o familiares ya te han hecho alguna advertencia con respecto a tus hábitos de bronceado:

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Alguna de tus obligaciones o compromisos se han visto afectados por tus hábitos de bronceado:

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¿Cómo te sientes mientras te bronceas?

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Imagina que fueses diagnosticado/a con un problema médico que te impidiese tomar el sol o broncearte en cabinas de broceado durante unos meses. ¿Cómo te sentirías?

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Por último, ¿cómo definirías tu relación con el sol?
¡Sigue así!
Enhorabuena. Parece, por tus respuestas, que tu relación con el sol es completamente saludable. No le concedes demasiada importancia al bronceado como valor estético, y tomar el sol no es una prioridad con respecto a otras actividades, valores o responsabilidades en tu vida. ¡Sigue así!
No obstante, te recordamos un par de consejos básicos para seguir cultivando una buena relación con el sol: evita broncearte en las horas centrales del día, usar protector solar siempre que salgas de casa, e intenta concederle menos importancia a la estética, trabajando en tu autoestima. Así minimizarás el riesgo de presentar un problema de adicción relacionado con la tanorexia, además de otras patologías graves como lesiones cancerígenas de piel.
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¡No bajes la guardia!
Por tus respuestas, parece que te gusta broncearte ocasionalmente como valor estético, pero debes permanecer alerta para tratar de priorizar la salud con respecto a la belleza. Tomar el sol es una práctica saludable, pero puede convertirse en un problema si se abusa de él, o si su prioridad interfiere con el desarrollo normal de otros aspectos de nuestra vida.
Procura evitar tomar el sol en las horas centrales del día, usar protector solar siempre que salgas de casa, e intenta concederle menos importancia a la estética, trabajando en tu autoestima. Así minimizarás el riesgo de presentar un problema de adicción relacionado con la tanorexia, además de otras patologías graves como lesiones cancerígenas de piel.
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¡Alerta!
Mucho cuidado. Tus respuestas dejan entrever una relación poco saludable con el sol. Es probable que tus hábitos estén muy dirigidos a la estética, y concedes mucha importancia y prioridad al bronceado; tanto es así que puede que hayas llegado a descuidar otras dimensiones de tu vida en favor de mantener el tono de piel. Incluso, es probable que ya presentes alguna quemadura grave en la piel con la potencialidad de convertirse en una lesión.
Te recomendamos acudir a un especialista para que evalúe tu situación y decida si necesitas algún tipo de tratamiento. Mientras tanto, procura evitar tomar el sol en las horas centrales del día, usar protector solar siempre que salgas de casa, e intenta concederle menos importancia a la estética, trabajando en tu autoestima. Así minimizarás el riesgo de presentar un problema de adicción relacionado con la tanorexia, además de otras patologías graves como lesiones cancerígenas de piel.