¿Vivir solo aumenta el riesgo de enfermedad mental?
Según algunos estudios, casi un tercio de la sociedad experimentará un trastorno mental en su vida.
Un nuevo estudio ha concluido que vivir solo está vinculado a trastornos mentales comunes como trastornos de ansiedad, del estado de ánimo o por el uso de sustancias. Los autores también han identificado el principal motor de esta relación preocupante.
Según algunos estudios, casi un tercio de las personas experimentará un trastorno de este tipo en su vida. Estas condiciones pueden tener un impacto significativo en el individuo, por supuesto, pero debido a su alta prevalencia, también afectan a la sociedad en general.
Debido a la influencia generalizada de los trastornos mentales comunes, los científicos están interesados en comprender la gama completa de factores de riesgo que contribuyen a la salud mental.
Un nuevo estudio, cuyos resultados han sido publicados en la revista PLOS ONE, revisa esta posibilidad. Los autores del trabajo concluyen que existe un vínculo entre vivir solo y los trastornos mentales comunes. Además, afecta a todos los grupos de edad y sexos, y su principal conductor, es la soledad.
La cantidad de personas que viven solas está creciendo constantemente en gran parte del mundo occidental. Esto se debe a varias razones, entre ellas el envejecimiento de la población, el hecho de que las personas tienden a casarse a una edad más avanzada y al aumento de las tasas de divorcio.
Estudios anteriores habían investigado esta relación, pero la mayoría se centraba en los adultos mayores y generalmente se enfocaban en una sola condición mental: la depresión.
Los autores del nuevo estudio querían llenar estos huecos vacíos. Buscaron vínculos entre vivir solos y los trastornos mentales comunes en general, e investigaron qué factores parecían estar influyendo en esta relación.
Los científicos de la Universidad de Versalles Saint-Quentin-en-Yvelines (Francia) analizaron los datos de 20.503 adultos, de 16 a 74 años, que vivían en Inglaterra. Los datos provienen de tres encuestas nacionales de morbilidad psiquiátrica que los expertos realizaron en 1993, 2000 y 2007. Los participantes completaron los cuestionarios revisados de la Lista de entrevistas clínicas, que evaluaron si habían experimentado síntomas neuróticos durante la semana anterior.
Las encuestas también recopilaron datos sobre una gran variedad de variables, incluyendo altura y peso, nivel de educación, situación laboral, consumo de alcohol y drogas, apoyo social y sentimientos de soledad.
Como se esperaba, los autores encontraron que el número de personas que viven solas ha crecido constantemente. En 1993, el 8,8% vivía solo. En el año 2000, el 9,8% y en 2007, el 10.7% vivía solo.
Su análisis también mostró que en todos los grupos de edad y sexos, había una asociación significativa entre vivir solos y tener un trastorno mental común. El tamaño de esta relación fue bastante similar en las tres encuestas.
Los trastornos mentales comunes eran más frecuentes entre los que vivían solos que entre los que no lo hacían:
En 1993: 19.9% vs. 13.6% que vivían con más personas
En 2000: 23.2% vs. 15.5% que vivían con más personas
En 2007: 24.7% vs. 15.4% que vivían con más personas
Cuando los científicos profundizaron en la relación entre los trastornos mentales comunes y vivir solos, encontraron que la soledad explicaba el 84% de la asociación. Estudios anteriores habían demostrado que la soledad está relacionada con la depresión y la ansiedad.
Por supuesto, no todos los que viven solos están solos o se sienten solos. Sin embargo, para aquellos que lo están, hay disponibles ciertas intervenciones para enfrentarse a la soledad, como las terapias de conversación, disposiciones de atención social e intervenciones basadas en animales.
Los investigadores reconocen ciertas limitaciones al estudio. Por ejemplo, se trató de un estudio transversal, lo que significa que revisó una instantánea de las personas en un momento dado. Los autores piden estudios longitudinales para determinar cómo esta relación podría desarrollarse con el tiempo.
Al igual que con cualquier estudio de esta naturaleza, no es posible evaluar la causa y el efecto: ¿desarrollaron las personas un trastorno mental común porque vivían solas o desarrollaron un trastorno mental y luego decidieron vivir solas?
O, tal vez, es más probable que alguien con una predisposición a los trastornos mentales comunes quiera vivir solo. Como siempre, los científicos necesitarán realizar más trabajos para llenar los vacíos.
Referencia: Relationship between living alone and common mental disorders in the 1993, 2000 and 2007 National Psychiatric Morbidity Surveys. Louis Jacob , Josep Maria Haro, Ai Koyanagi Published: May 1, 2019 DOI: https://doi.org/10.1371/journal.pone.0215182