Partos en casa ¿la opción más segura?
El parto en casa planificado debe contar con matronas cualificadas y colegiadas que tienen que haber asistido al menos 100 partos normales.
En la actualidad, los partos en casa están teniendo cada vez más relevancia y son motivo de debate en nuestra sociedad. En España, está aumentando esta práctica, generando un debate entre los profesionales de la salud y a nivel social pero, ¿son la opción más segura?
La American College of Nurses-Midwives definió el parto planificado en domicilio como “la asistencia a mujeres embarazadas seleccionadas, por profesionales cualificados, dentro de un sistema que prevé la hospitalización cuando sea necesario”.
Ligada a esta definición, también tenemos que destacar que la Organización Mundial de la Salud afirma que todas las mujeres tienen derecho a una atención respetuosa y digna durante el embarazo y el parto.
¿Existen otros factores a tener en cuenta? Y aquí está el debate: no solamente se trata de los deseos o creencias de la mujer y de la pareja. Entran en juego los derechos humanos, y, en particular, de las mujeres, como el derecho a la dignidad, intimidad, integridad física y la autonomía.

Pareja con la mujer embarazada
¿Qué es la violencia obstétrica? ¿Qué ocurre cuando no se respetan los derechos de las mujeres?
Se denomina violencia obstétrica y constituye una discriminación de género, representando una violación de los derechos humanos.
Su primera definición se realizó en Venezuela en 2007 como “la apropiación del cuerpo y procesos reproductivos de las mujeres por personal de salud, que se expresa en un trato deshumanizador, trayendo consigo una pérdida de autonomía y capacidad de decidir libremente sobre sus cuerpos y sexualidad, en un abuso de medicalización y patologización de los procesos naturales impactando negativamente en la calidad de vida de las mujeres”.
La violencia obstétrica hace referencia a las prácticas y conductas realizadas por profesionales de la salud a mujeres durante el embarazo, el parto y el postparto, tanto en el ámbito público como privado, que además, por acción u omisión son o pueden percibirse como violentas.
En un estudio cualitativo realizado en la provincia de Alicante entre 2009 y 2014 se compararon las ventajas y desventajas del parto en el hospital y el parto en casa.
Algunas de las desventajas expresadas del parto en el hospital eran la protocolización, el ambiente hostil, la pérdida del protagonismo, la no elección del profesional de la salud, el no respeto a derechos fundamentales e incluso la dificultad para que en ocasiones esté presente la pareja.
Por otro lado, las ventajas del parto en casa la definen como un trato digno, respeto a los derechos de la mujer y pareja, la libertad de decisión, seguridad, elección del profesional de la salud, tranquilidad, etc.

Mujer embarazada con una señal de peligro dibujada
¿Cuándo sabemos si el parto domiciliario es seguro?
La seguridad de la mujer embaraza y de su bebé, y los posibles riesgos que puede conllevar un parto debe hacernos pensar en que tenemos que evaluar qué conjunto de riesgos y beneficios son más aceptables para ella, y que concuerden más con su sistema de creencias, valores e intereses propios.
Si estás embarazada y te planteas la opción de un parto en tu domicilio, es importante que tengas seguimiento y control por parte de una matrona colegiada o equipo de matronas especializadas para poder evaluar todas las opciones posibles.
Lidia Lestegás, matrona (@lidiaciguena), comenta “pedirle a tu matrona su número de colegiada es garantizarte que te está asistiendo una profesional con 6 años de formación universitaria, altamente cualificada, y especializada en la asistencia al parto normal. Es importante que el parto en casa sea asistido por profesionales acreditados para ello en términos de seguridad”.
Debemos de pensar en los requisitos mínimos del parto a domicilio son una atención capacitada y una atención inmediata si hubiera complicaciones.
La seguridad del parto domiciliario depende de muchos factores, como puede ser la provisión de recursos, o la localización e instalaciones del domicilio como puedan ser agua caliente, calefacción o incluso si vives en un quinto sin ascenso. Todo ello se valora y evalúa conjuntamente con la familia.
Existen determinantes importantes para que se dé un buen resultado perinatal en los partos en casa:
- La experiencia de los profesionales que lo están atendiendo.
- Una adecuada monitorización fetal intraparto.
- El acceso a los servicios neonatales.
La experiencia de los profesionales que lo están atendiendo.
Una adecuada monitorización fetal intraparto.
El acceso a los servicios neonatales.
En cuanto a la experiencia, cualquier matrona acreditada en España tiene que haber asistido al menos 100 partos normales, por ello es imprescindible buscar profesionales colegiados que dispongan de formación específica y avanzada en reanimación neonatal.
Lidia Lestegás nos informa que “también disponemos de formación específica y avanzada en reanimación neonatal, aunque, por supuesto, se trabaja previniendo en todo caso esa posibilidad. En un parto en casa en el que todo ha ido bien es extremadamente excepcional que se tenga que llegar a una reanimación neonatal, y si se dan dificultades de adaptación a la vida extrauterina que no se pueden manejar, se dispone de circuitos claros establecidos para lograr un traslado rápido a unidades de cuidados avanzados, al igual que sucede en hospitales comarcales con respecto a sus hospitales de referencia.”
Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Barcelona han elaborado una guía de asistencia al parto en casa con los criterios de inclusión y de actuación durante el parto y postparto. Existen varias recomendaciones pero la principal es que el embarazo sea normal o de bajo riesgo y que suceda entre las 37 y las 42 semanas de gestación.

Mujer embarazada fumando
¿Qué implica ser un embarazo normal o de bajo riesgo?
Hablamos de embarazo de bajo riesgo cuando este tiende a ser normal, en una mujer que no tiene factores de riesgo que hagan peligrar la salud propia ni la de su bebé.
Por el contrario, existen factores de riesgo que sí generan exposición o peligro durante el embarazo como pueden ser:
- Los estilos de vida de la mujer como consumo de cigarrillos, beber alcohol o consumir drogas.
- Edad avanzada de la madre o en adolescentes.
- Problemas de salud existentes como la presión arterial alta, diabetes, enfermedad de tiroides, síndrome del ovario poliquístico, etc.
- Condiciones propias del embarazo como puede ser una diabetes gestacional, embarazo múltiple o preeclampsia y eclampsia.
Los estilos de vida de la mujer como consumo de cigarrillos, beber alcohol o consumir drogas.
Edad avanzada de la madre o en adolescentes.
Problemas de salud existentes como la presión arterial alta, diabetes, enfermedad de tiroides, síndrome del ovario poliquístico, etc.
Condiciones propias del embarazo como puede ser una diabetes gestacional, embarazo múltiple o preeclampsia y eclampsia.
Si bien, tampoco todas estas condiciones van a, por si solas, hacer que el parto en casa deje de ser una opción razonable para muchas mujeres. Aunque el embarazo requiera un control más exhaustivo, puede que el parto sí sea de bajo riesgo.
Por ejemplo, en la lista anterior, si una mujer tiene un hipertiroidismo controlado, o síndrome de ovario poliquístico, no implica, que no sea para ella seguro dar a luz en casa, si el resto de variables entran dentro de la normalidad.
Del mismo modo, aún no teniendo ningún factor de riesgo, nunca se excluye completamente la posibilidad de que puedan observarse signos durante el parto que requieran traslado.
En cualquier caso, es importante mantener una vida saludable y control prenatal con la matrona para poder detectar problemas, potenciar la salud, y hacer un seguimiento adecuado.
La estructura sanitaria en nuestro país no cubre actualmente la asistencia al parto domiciliario. Se debe trabajar en un sistema sanitario con espacios respetuosos con la mujer gestante y el proceso del parto ofreciendo garantías de plena seguridad para la madre y el niño.
Otros países, como Australia, Holanda, o Gran Bretaña, tienen una cultura de asistencia al parto domiciliario más institucionalizada, donde no sólo se permite, si no que en casos concretos se fomenta esta modalidad de asistencia.
Referencias bibliográficas