Cómo preparar en casa el café más saludable
Filtrar el café elimina ciertas sustancias que hacen que aumente el colesterol en sangre. También disminuye las probabilidades de sufrir un ataque cardíaco y morir de manera prematura.
El café es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo y el estimulante más empleado a lo largo y ancho del planeta. Un estudio recientemente publicado en el European Journal of Preventive Cardiology, una revista de la Sociedad Europea de Cardiología, ha encontrado un vínculo entre el método en el que se elabora esta bebida, los ataques al corazón y la longevidad. "El café sin filtrar contiene sustancias que aumentan el colesterol en la sangre. El uso de un filtro las elimina y hace menos probable los ataques cardíacos y la muerte prematura", afirma el profesor Dag S. Thelle, de la Universidad de Gotemburgo (Suecia) y uno de los investigadores del estudio. Una taza de café sin filtrar contiene unas 30 veces la concentración de las sustancias que aumentan los lípidos en comparación con el café filtrado.
Hace 30 años, Thelle descubrió que el consumo de café estaba relacionado con un aumento del colesterol total y del LDL (el malo), hasta el punto de ser posible que tuviera consecuencias perjudiciales para la salud del corazón. Se identificaron las sustancias perjudiciales y se descubrió que se podían eliminar usando un simple filtro. El equipo de investigadores inició, por entonces, un gran estudio de población que ha durado varias décadas y que ahora arroja interesantes resultados.
Los participantes del estudio (508 747 hombres y mujeres sanos de 20 a 79 años residentes en Noruega) debían rellenar un cuestionario sobre la cantidad y el tipo de café consumido. También se recogieron datos sobre variables que podían influir tanto en el consumo de café como en las enfermedades cardíacas, para tenerlas en cuenta en el análisis. Algunos ejemplos eran el consumo de tabaco, la educación, la actividad física, la altura, el peso, la presión arterial y el colesterol. Durante 20 años se les hizo un seguimiento. 46 341 participantes murieron. De ellos, 12 621 muertes se debieron a enfermedades cardiovasculares. De las muertes cardiovasculares, 6 202 fueron causadas por un ataque al corazón.
Lo que se vio es que beber café no era un hábito peligroso. De hecho, tomarlo filtrado era más seguro que no tomar nada de café (reducción de un 15% en el riesgo de muerte por cualquier causa durante el seguimiento). En cuanto a la muerte por enfermedades cardiovasculares, la infusión filtrada se asoció con una reducción del 12% del riesgo de muerte en los hombres y del 20% en las mujeres, en comparación con la ausencia de café. La menor mortalidad se produjo entre los consumidores de 1 a 4 tazas de café filtrado por día.
"El hallazgo de que los que bebían la bebida filtrada lo hacían un poco mejor que los que no bebían café en absoluto, no podía explicarse por ninguna otra variable como la edad, el sexo o los hábitos de estilo de vida. Así que creemos que esta observación es cierta", dijo Thelle.
Beber café filtrado también era más seguro, tanto para no morir por enfermedad cardiovascular como por ataque al corazón. "Nuestro análisis muestra que esto se debió en parte al efecto de aumento del colesterol del café sin filtrar", dijo el profesor Thelle.
Thelle también señaló que el café sin filtrar no aumentaba el riesgo de muerte en comparación con la ausencia de café, excepto en hombres de 60 años o más, en los que la infusión sin filtrar se relacionaba con una elevada mortalidad cardiovascular. Sobre esto, el profesor explica que en el estudio solo se contaba con la medida de consumo de café pero que en los años de la investigación en Noruega estaba cambiando la manera de preparar esta bebida. Los investigadores creen que los más jóvenes, que en un principio bebían café sin filtrar, empezaron a filtrarlo, reduciendo así la asociación con la mortalidad cardiovascular. Sin embargo, los hombres mayores cambiaban menos el hábito y seguían consumiéndolo sin filtrar.
El profesor Thelle subrayó que se trata de datos observacionales, pero que si las autoridades de salud pública le pidieran consejo les diría lo siguiente: "Para las personas que saben que tienen altos niveles de colesterol y quieren hacer algo al respecto, manténganse alejados de la bebida sin filtrar, incluido el café hecho con una cafetera. Para todos los demás, beban su café con la conciencia tranquila y opten por el filtrado”.
Referencias: Tverdal A, Selmer R, Cohen JM, Thelle DS. Coffee consumption and mortality from cardiovascular diseases and total mortality: Does the brewing method matter? Eur J Prev Cardiol. 2020. doi:10.1177/2047487320914443.