
Mitos y curiosidades del reino animal
¿Es verdad que los camellos almacenan agua en sus jorobas? ¿Duermen los tiburones? ¿Por qué los flamencos se sostienen sobre una sola pata?
En el reino animal existen algunos comportamientos muy distintos a los de los humanos, que pueden resultarnos curiosos, y sobre cuya explicación los científicos han especulado durante años. Debido a que en muchas ocasiones existe literatura insuficiente, o porque se cuelan falsas creencias en el imaginario social, suelen perdurar mitos sobre el comportamiento de algunos animales que conviene señalar y desmentir.
Por ejemplo, algunas de las creencias más extendidas son que los camellos almacenan agua en sus jorobas, que los perros ven en blanco y negro, que las arañas son presa de nuestras mandíbulas mientras dormimos o que los tiburones tienen como pasatiempo acudir a las costas a cazar seres humanos. Muchas de estas ‘animaladas’ han alimentado miedos injustificados y, en definitiva, han extendido la incultura científica.
A continuación, desmitificamos algunas de estas falsas creencias, y damos respuesta a algunos comportamientos curiosos sobre los animales.

Las vacas tienen dificultades para bajar escaleras porque la inclinación y la estructura de las escaleras no se encuentran en la naturaleza y están diseñadas para las proporciones de las piernas humanas. Una escalera suele tener una pendiente de 35 grados, por lo que los humanos podemos bajarla sin pensarlo dos veces. Las vacas, por otro lado, tienen una distribución de peso y estructura ósea muy diferente a la nuestra, por lo que es difícil que se muevan de la misma manera.

Hace muchos años, los cazadores de ballenas se dieron cuenta de que se podía enfriar el esperma hasta convertirlo en una cera con múltiples usos: cremas cosméticas, velas de cera fina, pomadas, productos de acabado textil y lubricantes industriales. El aceite de esperma, un aceite de color amarillo pálido, se utilizaba como aceite de iluminación y, más tarde, como lubricante y en la fabricación de jabón.

Este comportamiento ha desconcertado a los investigadores durante años, pero existen varias hipótesis que podrían servir de explicación.
Una de ellas sugiere que sostenerse sobre una sola pata ayuda a reducir la fatiga muscular, permitiendo que los flamencos se muevan más rápidamente cuando son amenazados por los depredadores.
Otra posible explicación implica el mantenimiento de la temperatura corporal. Debido a que las aves pierden mucho calor a través de sus patas y pies, sostener una pierna más cerca del cuerpo posiblemente podría ayudarlas a mantenerse calientes.
Sin embargo, otra hipótesis sugiere que los flamencos, como las ballenas y los delfines, son capaces de apagar la mitad de sus cerebros cuando duermen. Sostenerse sobre una pata, por tanto, sería un reflejo natural que les ayudaría a mantener el equilibrio y evitar que se caigan.
Los ornitólogos admiten que, hasta ahora, ninguna hipótesis ha sido confirmada con certeza y dicen que puede haber razones desconocidas por las que los flamencos tienden a sostenerse sobre una pata, incluida la reducción de la exposición a parásitos transmitidos por el agua.

Algunos felinos grandes, como los tigres, comúnmente se bañan para refrescarse o cazar presas. Pero, ¿por qué a los gatos domésticos suele desagradarles el agua?
Una posibilidad es que, debido a que la especie evolucionó en climas secos y tenía poca exposición a ríos o lagos, el agua (excepto para beber) es un elemento con el que no están familiarizados, y por lo tanto evitan.
Pero la explicación más probable de que a los gatos no les guste mojarse es debido a lo que el agua le hace a su pelaje. El pelaje mojado es extremadamente incómodo para un gato y, a menudo, tarda mucho tiempo en secarse. El pelaje mojado también es más pesado que el seco y, por lo tanto, hace que un gato sea menos ágil y más fácil de atrapar para los depredadores.

Los caballos suelen acostarse para dormir profundamente, en la fase REM. Sin embargo, durante el día suelen echar cabezaditas, como pequeñas siestas, mientras están de pie. ¿Por qué lo hacen?
Dormir mientras se está acostado puede ser peligroso para un caballo. Estos animales necesitan un poco de esfuerzo para levantarse, lo que los hace vulnerables a los ataques de los depredadores.
Y, ¿cómo consiguen dormir sin caerse? Pueden hacerlo gracias a su sistema de tendones y ligamentos, que ofrece un extraordinario apoyo, y que permite al caballo bloquear las principales articulaciones de sus patas.

El miedo a los tiburones es uno de los temores más injustificados, y que más ha alimentado Hollywood. Aunque la probabilidad de ser atacado por un tiburón en el mar es muy baja, dado que no está en la naturaleza del tiburón considerar al ser humano como una presa, sí se producen decenas de ataques cada año en todo el mundo. Si el ser humano no es percibido como alimento para el tiburón, ¿por qué se producen estos ataques?
Se cree que, especialmente en aguas poco profundas cerca de la costa –donde especies más pequeñas como los tiburones punta negra pueden alimentarse de bancos de peces más pequeños–, muchos encuentros con los escualos ocurren por simple confusión. El tiburón, preparado para morder cualquier cosa que se parezca remotamente a un pez, como un pie con una parte superior bronceada y un fondo más pálido, puede morder accidentalmente a un humano en el oleaje agitado de una playa abarrotada. En la mayoría de los casos, este tipo de encuentros consisten en una sola mordida, después de la cual el tiburón huye.
En el caso de los grandes tiburones blancos, que, junto con los tiburones toro y tigre, son las especies más grandes y peligrosas que se sabe que atacan a los humanos, existe evidencia de que los tiburones simplemente se dedicaban a ‘investigar’ lo que consideraban objetos extraños en el agua.
Pero, ¿por qué muerden? Sencillamente, porque no tienen manos. Sus bocas funcionan como órganos sensoriales finamente sintonizados, lo que lleva a los tiburones a morder objetos desconocidos como medio para examinarlos y determinar su posible valor alimenticio.

La creencia de que nos tragamos una media de ocho arañas al año mientras dormimos está muy arraigada en la cultura popular. Pero no es cierta.
Hay varias razones por las que las arañas no nos molestan mientras dormimos. En primer lugar, porque somos extremadamente grandes en comparación con las arañas, por lo que tienden a vernos simplemente como parte de su paisaje.
Además, el hecho de que una araña se encontrase a un humano dormido sería absolutamente aterrador para ellas, porque mientras dormimos tendemos a hacer mucho ruido a través de los latidos del corazón y la respiración. Estos sonidos crean vibraciones a las que las arañas son extremadamente sensibles. Como resultado, probablemente harían todo lo posible por evitarnos.

Los camellos son conocidos por su capacidad de pasar semanas sin necesidad de beber agua, una habilidad que los hace animales de carga particularmente útiles para las personas que viajan a través de entornos áridos.
Pero no es verdad que los camellos almacenen agua en sus jorobas, no es más que un mito. Las jorobas de los camellos en realidad almacenan tejido graso, que no agua, que se utiliza como fuente de alimento cuando la comida es escasa.
Aunque las jorobas no almacenan agua, los camellos siguen siendo increíblemente eficientes en la gestión de la cantidad de agua que usan cada día, por lo que pueden pasar casi una semana sin beber. Esto se debe en parte a la forma única de sus células sanguíneas, que son ovales. Las células sanguíneas de forma ovalada son capaces de soportar que los camellos consuman grandes cantidades de agua, ya que las células son más elásticas y pueden cambiar de forma más fácilmente.

Los gatos duermen una media de 15 a 20 horas diarias. Los gatos son depredadores naturales, lo que conlleva mucha energía.
Al anochecer, durante las horas del crepúsculo, es cuando están más activos, porque sus presas, roedores y pájaros, lo están también. El resto del día, los felinos duermen; incluso los domésticos, que han heredado este ancestral comportamiento.

Los pingüinos emperador hacen una llamada especial de dos tipos voces que utilizan para el reconocimiento individual.
El sistema aprovecha una peculiaridad en la anatomía de las aves: el órgano vocal de las aves, la siringe. Esta se divide en un tenedor, donde la tráquea se conecta a los pulmones. Esto permite que muchas especies de aves produzcan dos voces separadas al mismo tiempo.
Los pingüinos emperador utilizan las dos ramas de la siringe para producir dos frecuencias diferentes al mismo tiempo, creando un patrón de amplitud de latido. Los científicos han determinado que estos patrones contienen suficiente información individual para que los pingüinos se reconozcan entre sí.

Al contrario de lo que dicta la creencia popular, los perros no ven en blanco y negro. Sin embargo, son lo que llamaríamos ‘daltónicos’ (en el sentido más humano de la palabra), lo que significa que solo tienen dos receptores de color (llamados conos) en sus ojos, mientras que la mayoría de los humanos tienen tres.
Entonces, ¿qué colores ven y cuáles no? Los receptores de color en el ojo funcionan al percibir solo ciertas longitudes de onda de luz. En los seres humanos, cada cono percibe, aproximadamente, las longitudes de onda de la luz que corresponden al rojo, verde y azul violeta. Al superponer y mezclar el espectro de colores que perciben los tres conos humanos, somos capaces de ver una amplia variedad de colores. En los perros, sin embargo, los dos receptores de color en los ojos perciben longitudes de onda de luz que corresponden al azul y al amarillo, lo que significa que los perros solo ven en combinaciones de azul y amarillo. Por tanto, en lugar de rosas rojas brillantes, es probable que los perros vean pétalos de color marrón amarillento, y la hierba verde viva les parezca, más bien, deshidratada y muerta.

Otra de tiburones. Es un error común pensar que los tiburones nunca duermen porque deben seguir moviéndose para mantenerse vivos. Los tiburones también realizan periodos de descanso a lo largo del día, pero estos son muy diferentes del tipo de sueño de otros animales.
Los tiburones pueden llevar a cabo periodos de descanso profundo mientras están quietos, pero no 'se duermen', en el sentido estricto de la palabra. Al carecer de párpados, sus ojos permanecen abiertos perpetuamente y, durante estos periodos de descanso, sus pupilas aún controlan el movimiento de las criaturas que nadan a su alrededor.

Ciertos animales hibernan porque los suministros de alimentos escasean durante los meses de invierno. Al entrar en un sueño largo y profundo, evitan el consumo de energía durante este periodo, despertando cuando la comida se vuelve más abundante.
Se cree que un compuesto en la sangre de los hibernadores conocido como HIT (activador de inducción de hibernación) les permite a estos animales saber cuándo es el momento de prepararse para la hibernación. Los días más cortos, la disminución de los suministros de alimentos y las temperaturas más frías parecen influir en el HIT, aunque el mecanismo exacto sigue siendo un misterio.
Los animales que hibernan tienden a comer una gran cantidad de alimento en otoño y acumular importantes reservas de grasa corporal. La grasa proporciona calor corporal adicional, así como la energía necesaria para cuando el animal despierte. Algunos animales también almacenan comida en sus guaridas para consumirla durante breves períodos de vigilia. La temperatura corporal de estos animales se desploma, y su respiración y frecuencia cardíaca disminuyen drásticamente. El efecto puede ser tan extremo que un animal en hibernación puede parecer muerto.
Los osos se asocian comúnmente con la hibernación, aunque no se les considera verdaderos hibernadores, porque su temperatura corporal no disminuye significativamente. En cambio, otros animales que sí hibernan son el ratón saltarín, el murciélago pardo, la marmota y ciertas especies de ardillas terrestres.