Arrecifes de coral

Los pólipos de coral mueren, pero su estructura permanece y puede ser colonizada por otros pólipos que seguirán creando estructuras. Después de muchos años estas estructuras ocupan grandes extensiones, y forman lo que se conoce como arrecifes de coral.
Foto: Carson Ganci/*/Design Pics/Corbis

Las anémonas son organismos que viven anclados al sustrato. Muchos peces viven entre sus tentáculos, y se alimentan de ellas, o bien las usan como despensa. Esta fotografía fue tomada en la isla de Vancouver (Canadá)
Foto: Carole Valkenier/All Canada Photos/Corbis

Vista en detalle de una estrella-cesta en el archipiélago de Tukang Besi (Wakatobi), en la provincia de South Sulawesi, Indonesia.
Foto: Stuart Westmorland/Corbis

Muchas tortugas marinas se alimentan de coral, que les provee de calcio. Algunos de estos animales pueden vivir más de 150 años.
Foto: moodboard/Corbis

La Gran Barrera de Coral, al noreste de Australia, es el mayor arrecife del mundo, con una extensión de 34.870.000 hectáreas, que equivalen a cuatro veces la superficie de Andalucía.
Foto: Frans Lanting/Corbis

Los corales son realmente blancos, y sus colores se deben a unas microalgas, llamadas zooxantelas, que viven en simbiosis con ellos.
Foto: Image Source/Corbis

Un pez halcón (Paracirrhites forsteri) nada por encima de los tentáculos rojos de un ventilador de mar. Los tentáculos sirven a este coral para captar plancton y alimentarse. La imagen fue tomada en la costa de la isla de Likuri (Fiji).
Foto: Michael Wood/Stocktrek Images/Corbis

Esta estrella de mar azul brillante posa cerca de la isla de Komba, en el Mar de las Flores, Indonesia.
Foto: Stuart Westmorland/Corbis

Las barnaclas dependen del movimiento de las aguas para alimentarse, ya que son animales filtradores. Esta fotografía fue tomada en los rápidos de Nakwakto (Isla de Vancouver, Canadá), donde se juntan algunas de las corrientes de agua más rápidas del planeta.
Foto: Carole Valkenier/All Canada Photos/Corbis

Este pez, llamado Neoclinus toshimaensis, vive en los arrecifes de coral cercanos a Japón, en el océano pacífico.
Foto: amanaimages/Corbis