Un veneno para cada víctima

La composición del veneno de las distintas serpientes varía enormemente. Las especies terrestres se alimentan de diferentes reptiles, mamíferos, insectos y aves, por lo que los científicos creen que necesitan una gran diversidad de sustancias para poder aniquilar a todas sus víctimas potenciales. Las serpientes de agua, sin embargo, tienen una dieta más restrictiva, compuesta sobre todo de pescado.
Eso explica, según Manjunatha Kini y sus compañeros de la Universidad de Singapur, por qué en las especies acuáticas las toxinas (y los genes que las codifican) presentan mucha más diversidad y han evolucionado con mayor rapidez.
El profesor Kini subraya que identificar nuevas toxinas en los reptiles es interesante por su posible utilidad terapéutica. "Una toxina anticoagulante -que la serpiente utiliza para que su víctima se desangre - puede convertirse en el germen de un nuevo fármaco cardiovascular para impedir la formación de coágulos", afirma Kini.
BMC Evolutionary Biology (http://www.biomedcentral.com/bmcevolbiol//)