Muy Interesante

Conoce la Selva de Irati, paraíso natural de Navarra

En lo más profundo del bosque, entre las hayas y abetos, se esconde un entorno de ensueño, hogar de una rica variedad de fauna y flora única en el mundo.

En la frontera que conforma la cordillera de los Pirineos, al norte de la Comunidad Foral de Navarra, en España, y al sur del departamento de los Pirineos Atlánticos, en Francia, se extiende la selva de Irati, la mayor masa forestal ininterrumpida de Navarra. Etimológicamente, ‘Irati’ procede del euskera y, según la mayoría de las fuentes, significa ‘campo de helechos’. Este bosque cede su nombre al río Irati, de la cuenca del Ebro, que nace en esta área, a partir de la confluencia de los ríos Urtxuria y Urbeltza.
En territorio español, su extensión supera las 18 000 hectáreas, de las cuales más del 85 % son entornos naturales y seminaturales, en los que se identifican hasta 20 tipos de hábitat distintos. El bosque fue declarado zona de Especial Protección de Aves en 1990. Nueve años más tarde adquirió la categoría de Lugar de Importancia Comunitaria, en 2011, Zona Especial de Conservación y se aprueba su plan de gestión. Este plan tiene como objetivo establecer medidas, tanto activas como preventivas, para mantener o restablecer el estado de conservación de los hábitats naturales, las especies, los procesos ecológicos y los elementos naturales y culturales de la Selva de Irati.
Irati hayedo

El hayedo de la Selva de Irati, en torno al río homónimo. - Aruizhu/iStock

Las comunidades vegetales de Irati

Más de 9000 hectáreas de la Selva de Irati las ocupan los hayedos. Son bosques estructurados principalmente por el haya (Fagus sylvatica), la especie dominante en las zonas altas, aunque en entornos más bajos convive también con el abeto (Abies alba), formando un bosque mixto hayedo-abetal. Casi 3700 hectáreas del hayedo de Irati está formado por este bosque mixto. Embebidas en el bosque, aparecen con frecuencia el acebo, el abedul, el tilo, la zarzamora o el serval. Hay también una escueta presencia, de bosques de tejo (Taxus baccata). En las riberas de los ríos dominan los bosques aluviales, ocupados sobre todo por el aliso, el fresno y el sauce blanco.
El matorral es otro hábitat frecuente en la Selva de Irati, especialmente en los claros y los márgenes del bosque. Son entornos dominados por el brezo (Erica spp.), aunque también hay comunidades de boj y de enebro. Entre los pastizales destacan algunas especies emblemáticas como la planta carnívora Drosera rotundifolia, el narciso de hoja pálida (Narcissus pseudonarcissus pallidifolius), el narciso menor (Narcissus minor minor), ambos endemismos cántabro-pirenaicos, o la festuca del alto pirineo (Festuca pyrenaica), endémica del Pirineo oscense y navarro.
Mariposa isabelina

Mariposa isabelina, endemismo francoibérico presente en la Selva de Irati. - R.Ortega Marinas/iStock

La fauna de Irati

La Selva de Irati cuenta con una fauna abundante, con elevada biodiversidad y algunas de las especies más emblemáticas. Destaca el escarabajo Rosalia alpina entre los invertebrados, propio de los hayedos, protegido por la Convención de Berna, o la espectacular mariposa isabelina (Graellsia isabellae), endemismo francoibérico de casi 10 centímetros de envergadura.
En las aguas del Irati también se pueden encontrar algunos endemismos pirenaicos, como la rana pirenaica o el tritón pirenaico. Aunque tal vez el más representativo es el desmán de los pirineos (Galemys pyrenaicus), un mamífero semiacuático, insectívoro, muy esquivo y difícil de ver, y prácticamente desconocido hasta que el equipo de Félix Rodríguez de la Fuente lo filmó por primera vez y lo popularizó en sus documentales de El Hombre y la Tierra.
Otros mamíferos muy llamativos de este entorno son la nutria europea y el visón europeo, este último gravemente amenazado por la intrusión del invasor visón americano y su enfermedad aleutiana. A los ciervos, corzos y jabalíes se añaden los murciélagos. Al menos cuatro especies de quirópteros destacan en la Selva de Irati: la barbastella, el murciélago de herradura mayor y menor, y el murciélago de cueva.
Pico dorsiblanco

Pico dorsiblanco. - P.Vahlersvik/iStock

Tal vez, la mayor diversidad de animales en Irati la encontramos entre las aves. La Directiva de Aves agrupa a un total de 21 especies de presencia significativa en el bosque, algunas en grave peligro de extinción. Hay varias especies de pájaros carpinteros, como el pico dorsiblanco (Dendrocopos leucotos) o el pito negro (Driocopus martius), ambas habituales en Asia y hasta el centro de Europa, pero con una población ibérica muy reducida.
Abundan también las aves rapaces, desde las más comunes, como el azor, la culebrera, el aguilucho pálido, el halcón peregrino o las águilas calzada y real, hasta otras más amenazadas, como el buitre leonado, el quebrantahuesos o el alimoche.
Cueva de Arpea

La enigmática Cueva de Arpea, en la Selva de Irati. - R.Aranda/iStock

Un plan de gestión colaborativo

Los planes de gestión de la Selva de Irati buscan compatibilizar la preservación del entorno con el mantenimiento de actividades al aire libre, siempre que sean de bajo impacto. El entorno ofrece muchas posibilidades para pasar tiempo en contacto con la naturaleza, lo que permite disfrutar de sus paisajes y entornos, mientras se trata de concienciar al público sobre la importancia de conservar estos parajes naturales tan espectaculares.
Están diseñadas varias rutas de senderismo autorizadas, en las cuales los visitantes pueden saciar su curiosidad, adentrándose a descubrir los misterios que encierran sus hayedos. Otras rutas se han habilitado para recorrer el área en bicicleta o a caballo, e incluso algunas empresas organizan actividades de escalada y descenso de cañones.
Crómlech de Orgambide

Crómlech de Orgambide, en la Selva de Irati - J.Magrans./iStock

Otro atractivo que ofrece la selva de Irati es la posibilidad de visitar los crómlech o monumentos megalíticos de Azpegui y de Orgambide, o el Dolmen de Soroluze, y la espectacular cueva de Arpea, donde, dice la leyenda, habitan las Lamias, seres con cuerpo de mujer y pies de ánade, íntimamente asociadas con el agua, propias de la mitología vasca.
Casi de visita obligada son los pueblos próximos a la Selva, como Jaurrieta, Ezkaroze u Otsagabia, con una estética que parece sacada de un cuento. Y, en el margen occidental, llegamos a Roncesvalles, el famoso punto de partida del Camino de Santiago.

Referencias:

  • Bañares Baudet, Á. et al. (Eds.). 2004. Festuca altopyrenaica Fuente & Ortúñez. En Atlas y Libro Rojo de la Flora Vascular Amenazada de España (p. 1069). Dirección General de Conservación de la Naturaleza.
  • European Environment Agency. s. f. Site factsheet for Roncesvalles-Selva de Irati (N.o ES0000126).
  • Natura 2000. s. f. Roncesvalles-Selva de Irati (N.o ES0000126).

La ventana a un mundo en constante cambio

Muy Interesante

Recibe nuestra revista en tu casa desde 39 euros al año

Suscríbete
Suscripciones a Muy Interesante
tracking