Los pelícanos que son amigables se reproducen mejor
Según esta investigación, ofrecerles opciones sociales a los pelícanos mejora el éxito reproductivo.
Los pelícanos que eligen sus propios amistades (es decir, a sus grupos) tienen más probabilidades de reproducirse con éxito. Esta es la conclusión a la que ha llegado una nueva investigación desarrollada por la Universidad de Exeter, la Universidad Sparsholt y la Universidad Reaseheath (Reino Unido).
El estudio, que ha analizado el comportamiento de los pelícanos blancos en cautiverio, concluyó que ofrecerles opciones sociales a las aves y permitir que se formen grupos mejora el éxito reproductivo. Asimismo, el estudio reveló que los pelícanos prefieren relacionarse con individuos concretos, y que existe una estructura social en la bandada en la que los subadultos (es decir, el equivalente a los adolescentes en los seres humanos) pasan más tiempo entre ellos que con las aves adultas.
Por otro lado, los pelícanos que habitan en los zoológicos suelen reproducirse con menor frecuencia. Además, a diferencia de otras aves más populares, como los pingüinos, reciben muy poca atención, por lo que prácticamente no son investigadas.
Por esta razón, el equipo de investigadores decidió recopilar dados del zoológico de Blackpool sobre el comportamiento, el uso del espacio y las preferencias de agrupación de estas aves en torno a los eventos de anidación. Así, según el autor principal de la investigación, Paul Rose, comprender el uso del espacio y el comportamiento de los pelícanos es fundamental para que se comporten de la misma forma que lo harían en cautiverio y que tengan, por tanto, un buen bienestar animal.

retrato de pelícano
Reproducción de los pelícanos blancos
Según los investigadores, el estudio permite identificar los vínculos fuertes entre estas aves y descubrir cuáles son los líderes en una bandada. Además, gracias a esta información los científicos pueden determinar qué aves son las que van a iniciar la reproducción y en cuáles es necesario fomentar dicha actividad.
El equipo de investigadores también encontró señales específicas de comportamiento que podrían indicar a los criadores de pelícanos cuándo es probable que ocurra la reproducción. Por ejemplo, los datos que se recopilaron antes de que los pelícanos comenzaran a anidar, reflejaron que la bandada estaba más alerta durante ese tiempo, lo que podría sugerir que la vigilancia es un precursor del cortejo o de la actividad de anidación.