Los gorilas adoptan a crías huérfanas en la naturaleza
Estos primates han evolucionado para proteger a las crías de los depredadores y los peligros de la naturaleza en caso de que pierdan a sus madres.
Al igual que las personas, los gorilas pueden adoptar crías huérfanas de su manada. Hace varios años, cuatro gorilas hembra se fueron a casa y abandonaron no solo a su pareja (un gorila bastante enfermo) sino también a sus crías, que todavía no tenían edad suficiente para alimentarse. Probablemente pensaron que su descendencia estaría más segura con el padre, pese a estar enfermo, que con los nuevos machos que suelen matar a las crías de otros grupos. Sin embargo, la mayoría de las crías abandonadas corren el riesgo de morir de forma prematura.
Sin embargo, los investigadores se llevaron una grata sorpresa: el tío de los pequeños, un gorila macho llamado Kubaha, se convirtió en el cuidador de las crías. De hecho, según Tara Stoinski, científica en Dian Fossey Gorilla Fund (una organización para la protección de los gorilas de montaña en peligro de extinción), el gorila los dejó dormir en su nido y trepar sobre él.
Un comportamiento habitual en gorilas
Según diversas investigaciones recientes, este comportamiento es muy habitual en los gorilas de montaña. Un estudio elaborado por el Centro de Investigación Karisoke de Gorilla Fund, en Ruanda, concluye que cuando los gorilas jóvenes pierden a sus madres, y en ocasiones también a sus padres, no corren un mayor riesgo de morir porque el resto del grupo los protege.
La mayoría de los chimpancés, monos y babuinos que todavía dependen del apoyo de sus padres suelen morir si pierden antes de tiempo a su madre. Esto se debe a que las madres lo alimentan, limpian y los protegen de los depredadores. En cambio, los gorilas de montaña parecen no sufrir tanto, ya que el grupo ha evolucionado para proteger a las crías de los depredadores y los peligros de la jungla en el caso de que pierdan a sus madres.

gorila negro
Investigación en gorilas huérfanos
Un destacado grupo de primatólogos llevó a cabo una investigación utilizando datos de 59 gorilas de entre 2 y 8 años que habían sido abandonados por sus madres. Después, compararon la supervivencia a lo largo de sus vidas con la supervivencia de 134 gorilas que no eran huérfanos. Así, los científicos descubrieron que los gorilas que habían perdido a su madre a una edad temprana no solo no tenían un mayor riesgo de morir, sino que tampoco sufrieron ningún efecto a largo plazo en su capacidad reproductiva o en su rango social.
Ahora, los investigadores están centrados en analizar otras especies, para comprobar si también adoptan a crías sin madre con más frecuencia de lo que suele pensar. No obstante, los estudios sugieren que este comportamiento altruista no es exclusivo de los seres humanos, y que los padres (y la familia) juega un papel fundamental en la vida de los primates.