¿Por qué los estorninos vuelan en grandes bandadas en invierno?
Siempre que aparece el frío, vemos cómo nuestros cielos se llenan de estas bandadas de pájaros.
El estornino común (Sturnus vulgaris) es una especie de ave de unos 20 centímetros de largo y plumaje negro iridiscente que vemos sobre todo en la época invernal, que es cuando no se enfrentan a la labor de cuidar de sus polluelos y pueden ocuparse de su propia supervivencia.
Lo habitual es ver enormes bandadas de estas aves y es posible que te hayas preguntado alguna vez por qué vuelan en grupos de hasta decenas de miles de ejemplares que se mueven al unísono.
Un grandioso fenómeno de la naturaleza
Las hordas de estorninos realizan todo un espectacular ballet aéreo que se presenta aparentemente bien coordinado. Con el movimiento de estas vastas nubes de pájaros, son capaces de oscurecer el cielo y borrar temporalmente la puesta de Sol debido a su magnitud.
Aunque también podemos ver estas bandadas en primavera, las exhibiciones son mucho más pequeñas y menos impresionantes que las que podemos contemplar cuando llega el frío.
Según los expertos, las caídas repentinas de temperatura provocan una migración más uniforme y abrupta de los estorninos, de ahí que se congreguen menos aves en grupo. Después de varios días de “baile aéreo”, los estorninos se moverán en una enorme bandada y se dirigirán a zonas más cálidas para pasar el invierno.
Los beneficios de volar en bandadas
Una estrategia de supervivencia. Vuelan en bandadas porque agruparse les ofrece seguridad, ya que a los depredadores, como los halcones peregrinos, les resulta más difícil apuntar a un ave concreta en medio de una hipnotizante bandada de miles de pequeños pajaritos. Es una estrategia similar a la que utilizan los bancos de peces en el mar. También lo hacen para calentarse por la noche e intercambiar información (como una buena zona en la que obtener alimento).
El agrupamiento también permite que las aves vuelen más lejos usando menos energía porque cuando el ave líder de la bandada bate sus alas, crea elevación para las aves que se encuentran detrás: cada una, menos la primera, vuela en la corriente ascendente del ala del ave de delante.
Conforme pasan las semanas se suelen reunir cada vez más pájaros justo antes del anochecer, y hay lugares en que la cantidad de estorninos puede alcanzar los 100.000 ejemplares -o incluso más-. Ver a miles de estorninos volar y girar al unísono, creando remolinos de 'humo negro' en el cielo, es una visión extraordinaria.
Los estorninos se conocen como 'migrantes parciales': aves que migran en algunos lugares pero no en otros. En España, el estornino negro (Sturnus unicolor) vive en nuestro país durante todo el año pero el estornino pinto (Sturnus vulgaris) es invernante.
¿Y cómo es que no chocan al volar?
Su vuelo es precisamente su medio de comunicación. Suelen hacerlo haciendo mucho ruido, por lo que están informando en todo momento de cuál es su posición a cada uno de los miembros de la bandada; es la clave para no chocarse mientras vuelan. La sincronía de su vuelo es tan sorprendente que, en la década de 1930, el famoso ornitólogo inglés Edmund Selous (fallecido en 1934) postuló que estas 'espeluznantes' exhibiciones eran el resultado de la telepatía entre las criaturas.