Curiosidades y cuidados del conejo de angora
Esta raza originaria de Turquía fue objeto de explotación en muchos países debido a su bonito pelaje.¿Quieres saber más sobre ella? Te lo contamos.
El conejo de angora es originario de Ankara (Turquía), desde donde se expandió a Europa y posteriormente al resto del mundo. A lo largo de su historia, este conejo ha sufrido bastantes cambios en lo referido a su genética puesto que ha sido objeto de bastantes cruces, por lo que a día de hoy, es algo diferente al conejo de angora que surgió originalmente.
A día de hoy existen cuatro variedades de este animal: conejo de angora inglés, conejo de angora francés, conejo de angora gigante y conejo de angora satén. En cualquier caso, y al igual que ocurre con el gato de angora (con el que comparte origen), uno de los rasgos que los diferencia de otras razas es sin duda su bonito pelaje, largo y sedoso. Por lo general, al tratarse de un conejo enano no suele pesar más de 2 kg ni alcanzar grandes dimensiones.
Para mantener su pelo en buen estado y que luzca todo lo bien que debería, hemos de prestar especial atención al cuidado de este, que debemos cepillar al menos dos o tres veces por semana. Te recomendamos que escojas un cepillo no excesivamente duro, puesto que la piel del conejo de angora es bastante sensible y podrías hacerle daño. En este aspecto, destacar que es posible que en un principio te cueste algo de trabajo que te deje que lo cepilles, pero si tienes paciencia y lo tratas con cariño, irás notando que cada vez te costará menos.
Además, destacar que son animales un poco delicados en lo que a las temperaturas respecta. No llevan bien los extremos, es decir, no toleran aquellas que superan los 30 grados ni las que bajan de los 10. Por eso, debemos hacer hincapié en la importancia de situar su jaula en un lugar alejado de fuentes de frío o calor.
Este conejito tan adorable tiene una trágica historia detrás, puesto que debido a la gran belleza de su pelaje, en muchos países eran explotados con frecuencia y sometidos a malos tratos para arrancárselo.
¿Quieres saber más sobre el conejo de angora? No te pierdas la galería de imágenes.

Al igual que ocurre con el resto de conejos, el de angora come sobre todo verduras, hortalizas, frutas y heno.

Como los gatos, el conejo de angora odia el agua y lo normal es que se asee él mismo. Por ello, con uno o dos baños al año sería suficiente. Otra buena manera de mantenerlo en condiciones óptimas de higiene es limpiarlo con unas toallitas húmedas.

Debido a su bonito pelaje, el conejo de angora ha sido explotado y torturado con frecuencia para arrancárselo.

El conejo de angora tiene un pelaje sedoso y abundante que necesita ser cepillado con frecuencia: de dos a tres veces por semana. Además, también es conveniente cortárselo con cierta frecuencia para que no se formen nudos.

¿Sabías que los dientes de los conejos nunca dejan de crecer? Es por ello que necesita tener a mano siempre algo que roer para ir desgastándolos.

Se trata de uno de esos conejos categorizados como enanos, por lo que no suele presentar grandes dimensiones. De hecho, es raro que exceda los 4 kgs.

Comparte denominación y orígenes con el gato de angora: se cree que es de Turquía.

Has de tener especial cuidado con dónde sitúas su jaula, puesto que no es recomendable que esté cerca de fuentes de calor ni de frío. El motivo es que no tolera las temperaturas extremas, es decir, aquellas por encima de los 30 grados ni por debajo de los 10.

Hay cuatro variedades diferentes: conejo de angora inglés, conejo de angora francés, conejo de angora gigante y conejo de angora satén. Todas ellas presentan unos rasgos prácticamente iguales, aunque varían en tamaño y color del pelaje.

Debes tener en cuenta el tamaño del conejo, lo ideal es que pueda moverse con facilidad. Además, la base ha de estar hecha a base de virutas de madera, papel o paja.