Existe la creencia de que los humanos somos los seres más torpes por excelencia por ese dicho de “tropezamos dos veces con la misma piedra”. Ciertamente, muchos de nosotros tenemos como virtud una torpeza innata que crea situaciones la mar de graciosas pero… ¡no somos los únicos!
Nuestros peludos también tienen lo suyo y es que en algunas ocasiones nos hacen reír a carcajadas con sus experimentos fallidos mezclados con un poco de torpeza. Que si se quedan atascados en sitios que te hacen pensar: "¡¿Pero cómo has llegado ahí?!"; que si se confunden de lugar o si se pelean con su propia sombra. ¡Son increíblemente graciosos!
Ciertamente los perros siempre han destacado por su agilidad y su firmeza pero todos tenemos torpeza dentro de nosotros. ¡Deberíamos admirarla! ¡Cada uno de nosotros tenemos una torpeza única e incalculable!
Olvídate de esa creencia que dice que la torpeza es únicamente una cualidad humana ya que los animales nunca son torpes y ríete con esta galería que te traemos, que demuestra que los perros son los auténticos reyes de la torpeza.
Pero… ¿Cómo te has metido ahí?
“No lo sé, lo juro, no sé qué ha pasado”.
¡Toma, Dobby! ¡Cógelo!
“Voyprrffhfgfg”.
No es sencillo jugar con mi perro
“Este juguete me odia, dueño".
Algunos son torpes debido a su juventud
“Es que aún no controlo bien las escaleras, jo…”
Otros debido a su tamaño
“No lo entiendo, si yo cabía por aquí”.
Y otros no tienen remedio
“¿Cómo te saco ahora yo de ahí?”
Otros prefieren disimular
“Estoy así porque he querido tocar el suelo y estar cómodo a la vez. No te vayas a pensar que soy un torpe".
Otros no tienen claro el funcionamiento de las cosas
“Pelusa... esa no es tu cama. Un momento... ¡¿Dónde esta la comida que había?! ¡Pelusa!”.
Otros… Bueno, no lo tenemos claro
“Vamos a ver me puedes explicar qué ha pasado Toby”.
Pero es que son tan graciosos
“Esto… hola… ¿puede ayudarme alguien?”
Tan impredecibles
“¡Hola vecino! Nada, aquí relajándome en mi seto”.
Tan… ¿especiales?
“Es un nuevo complemento que me he creado. Voy a ser la envidia de las tendencias perrunas de este año. El collar de rejilla.”.
Aunque muchas veces no es sencillo sacarles su mejor cara
“Llevo 50 fotos y en todas está cerrando los ojos”.
Y otras veces no podemos entenderlos
“Lleva media hora intentando comerse la luz”.
Son únicos
Y sus torpezas son, ante todo, graciosísimas.
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