¿Te has enamorado de un rottweiler? ¿Adoras la noble carita del dogo argentino? ¿Suspiras por un akita inu? Como sabrás, estas razas de perros están catalogadas de potencialmente peligrosas y, debido a esta clasificación se le exige una serie de requisitos a la persona que se vaya a hacer cargo del animal. Antes de entrar en faena, te vamos a dar un consejo muy útil.
Consejo para dueños de perros potencialmente peligrosos
En Muy Mascotas somos fieles defensores de la educación en positivo y creemos que a todos los dueños de perros nos vendría bien acudir a un etólogo o adiestrador que nos dé claves específicas para que nuestros peludos estén bien educados, que sean lo más cívicos posibles. En el caso de los PPP, hay que tener en cuenta que suelen ser perros grandes y con mucha fuerza (¡son unos musculitos!) por lo que son más complicados de manejar que, por ejemplo, un chihuahua. Con más razón, es conveniente que si tenemos un PPP, contemplemos los servicios de un adiestrador y si este está especializado en perros peligrosos, mejor que mejor. Solo el experto sabrá darnos las pautas para tener un perro obediente y que, por ejemplo, una personalidad insegura no se vuelva peligrosa.
Vacíos legales en la tenencia de PPP
La ley obliga a que tanto el dueño del perro como los miembros de la familia que vayan a pasearlo deben poseer la licencia. Pero ¿y si contratas los servicios de un paseador de perros para que saque a tu peludo cuando estás trabajando? ¿Esa persona tendría que sacarse la licencia cuando no es propietaria?
Existen casos en los que el pequeño tamaño del PPP no obliga a sacar la licencia y demás papeles. Sin embargo, no queda suficientemente claro en el Real Decreto 287/2002, de 22 de marzo, por el que se desarrolla la Ley 50/1999, de 23 de diciembre, sobre el régimen jurídico de la tenencia de animales potencialmente peligrosos publicado en el BOE.
Otro aspecto que a los dueños de perros PPP no les queda claro es si cada año hay que enviar un certificado al Registro de Animales Potencialmente Peligrosos (vía Junta de Distrito) para informar de que el animal está en buen estado de salud.
Dicho lo cual, pasamos a contarte cuáles son las obligaciones que tienes que cumplir si tu mascota es un PPP.
Inscripción en el Registro Municipal de Animales Potencialmente Peligrosos
Para empezar, deberás inscribir a tu perro en el Registro Municipal de Animales Potencialmente Peligrosos
Licencia para perro potencialmente peligroso
Si quieres tener un perro catalogado como potencialmente peligroso, tendrás que sacarte una licencia en el ayuntamiento y renovarla cada 5 años. Debes ser mayor de edad, no haber sido sancionado por infracciones graves o muy graves ni haber cometido una serie de delitos (certificado de antecedentes penales).
Plazo para pedir la licencia
Según la normativa, los dueños de PPP deben solicitar la licencia en un máximo de tres meses después de tener al peludo. Si el perro es cachorro, no es necesario tenerla hasta que cumple un año de edad.
La licencia es personal e intransferible
Por lo que, si en casa vais a sacar al perro varias personas, necesitaréis una licencia diferente para cada uno.
Seguro para perro potencialmente peligroso
Otro requisito para la tenencia de estos canes es la contratación de un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros con una cobertura mínima de 120.000 euros. Existen dos opciones para asegurarle: o bien hacerle un seguro individual o bien incluirle en el seguro del hogar. En este caso deberá figurar en un párrafo en el que se especifique que es un PPP y se indicará su nombre, número de chip y edad.
¿Qué cubre el seguro de responsabilidad civil?
Este seguro cubre las posibles lesiones corporales y/o daños materiales que el perro pudiera ocasionar a terceras personas, excluyendo de este grupo el cónyuge, pareja de hecho, ascendientes, descendientes y hermanos del propietario así como las personas que se queden a cargo del peludo en determinados momentos.
Certificado de capacidad física
Para tener un PPP tendrás que realizar unas pruebas físicas de vista, oído, sistema locomotor y neurológico similares a las que se hacen para la obtención del carnet de conducir. De hecho, estas pruebas se efectúan en los centros de reconocimiento médico, los mismos que para conducir.
Certificado de aptitud psicológica
También hay que someterse a unas pruebas cuya finalidad es comprobar que no se tiene ninguna enfermedad o deficiencia de carácter psíquico o psicológico, que suponga incapacidad o limitación del discernimiento. El artículo 5 de la Ley 50/1999 hace referencia a trastornos mentales y de conducta, problemas de personalidad, dificultades de evaluación, percepción y toma de decisiones y otros problemas que limiten las facultades mentales.
Y después de juntar todos los papeles…
La cosa no se acaba aquí. Cuando tengas todos los papeles en regla, cuentas con 15 días hábiles para inscribir a tu perro en el Registro. Tendrás que presentar: la licencia PPP, el seguro de responsabilidad civil, su cartilla sanitaria, un certificado veterinario que te lo hará tu veterinario de confianza (informando de que el peludo no tiene ninguna enfermedad que lo haga peligroso), tendrás que dejar claro dónde va a vivir el animal y, por último, que conste por escrito el motivo por el que tienes un PPP.
Obligación de llevar bozal
Los perros catalogados de potencialmente peligrosos deberán llevar siempre el bozal puesto cuando salgan a pasear por lugares públicos.
La correa no puede ser extensible
Un PPP deberá salir a pasear con una correa o cadena no extensible y que no supere los 2 metros de longitud. Además, una sola persona no podrá llevar más de un perro potencialmente peligroso.
La licencia, siempre encima
Por ley, cada vez que saques a tu PPP deberás llevar encima la licencia, ya que te la pueden pedir. Lo que no queda tan claro es si contratas a un paseador, qué se debe hacer en ese caso.
Comunicar el fallecimiento o el robo
Si cuando te hiciste con tu peludo tuviste que inscribirlo en Registro Municipal de Animales Potencialmente Peligrosos, si fallece o tienes la mala fortuna de que te lo robaran, deberás informar a este organismo. La ley obliga a comunicar estas situaciones en un plazo máximo de 48 horas.
Medidas de seguridad en casa
Si vives en una casa con jardín, chalet, parcela, patio, terraza u otro espacio delimitado, tendrás que asegurarte de que tu perro no pueda escapar (si está fuera). De lo contrario tendrá que estar dentro de la casa o fuera atado.
Microchip
Este apartado del Real Decreto es una obviedad ya que no solo los perros catalogados de potencialmente peligrosos deben llevar su microchip identificativo sino todos los canes.