Los peligros de que el perro coma basura
Desde sufrir una gastroenteritis hasta contraer parásitos intestinales, ojito con que el perro meta el hocico en el cubo de la basura, es más peligroso de lo que crees.
Seguro que alguna vez has pillado a tu perro rebuscando y comiendo los desperdicios del cubo de la basura tal y como nos cuenta Beatriz Ramos en este vídeo. ¿Llegaste a tiempo para evitar que sufriera una indigestión o incluso una gastroenteritis? ¿Tuviste que llevarlo corriendo al veterinario? ¿O hubo suerte y no le dio tiempo a llevarse la porquería a la boca? Ingerir desperdicios de la basura puede tener consecuencias muy graves para la salud de nuestros peludos, estos son algunos de los problemas que pueden ocasionarles:
- Vómitos y diarreas. Es lo más normal que puede pasarle a un perro que coma del cubo de la basura. Los detritus que se encuentran en ella no están refrigerados y se mezclan unos con otros, la descomposición de cuerpo está más que asegurada.
- Gastroenteritis. Los alimentos contaminados que acaban en el cubo de la basura y posteriormente en el estómago de nuestra mascota pueden desencadenar una gastroenteritis con su peligrosa fase de deshidratación posterior.
- Parásitos intestinales. Si en la basura hay alimentos crudos como el pescado y la carne, el perro que los ingiera puede contraer anisakis (puede estar presente en el pescado) o parásitos que pueblan la carne.
- Bacterias. Los perros, al igual que las personas, pueden sufrir salmonelosis si ingieren alimentos que tengan salmonela.
Qué hacer si el perro se intoxica comiendo basura
Si en un descuido tu peludo se ha comido todo lo que había dentro del cubo de la basura y se ha intoxicado, ni te lo pienses, llévalo al veterinario lo antes posible. Dependiendo de lo graves que sean los síntomas (vómitos, diarreas, deshidratación) el veterinario determinará la administración de suero y antibióticos, de alimento especial para canes con problemas gástricos o incluso de ayuno unos días.
Visto todo esto, desde Muy Mascotas te recomendamos evitar que el perro “pesque” cualquier cosa de la basura no dejando el cubo a su alcance. Es un gesto muy sencillo pero de gran importancia para su salud.