Cómo adiestrar a un gato rebelde
Si educar a un gato es difícil, adiestrarlo para que haga determinadas cosas podría parecer imposible.
Y, sin embargo, a veces los vemos interpretar un papel, por así decirlo, en anuncios, películas e incluso obras de teatro. ¿Cuál es el truco?
Augusto Peralta, copropietario de Fauna y Acción, empresa especializada en facilitar animales para rodajes, nos da las claves: “Si lo comparamos con el adiestramiento de un perro, el del gato resulta complejo, pero está claro que si somos capaces de hacerlo con tigres, podemos conseguirlo con ellos”. La idea, explica Peralta, es comenzar a entrenar al animal cuando es muy pequeño. Hay que lograr que se acostumbre a salir de su recinto y a viajar en el transportín, y que se socialice con la gente y se encuentre cómodo entre focos y cámaras. “No todos los individuos sirven”, aclara. Y añade: “Algunos son más miedosos que otros, pero eso lo vas descubriendo con el tiempo”.
Más tarde, cuando se empieza a trabajar de verdad, hay que ensayar todos los días. Con todos los animales se utiliza el sistema de acción-recompensa, es decir, se les premia cuando llevan a cabo correctamente lo que se les pide, pero los gatos difieren un poco en este punto: comer es el único estímulo que los motiva. “Solo así podemos conseguir que hagan algo para cine o televisión, como chuparse una pata en un entorno que les resulta un poco hostil. El animal se ha acostumbrado a que recibe alimento siempre que hace ese ejercicio. A veces se le mantiene en ayunas hasta que llega el momento”. Eso no significa que se mate de hambre al gato, sino que el día del rodaje comerá cuando trabaje; con la tripa llena es más probable que, sencillamente, no haga nada. Eso sí, un factor que nunca puede faltar en el entrenamiento de animales, gatos incluidos, es la paciencia. “Mucha, mucha paciencia”, dice Peralta.