Galicia prohibirá los circos con animales salvajes
El gobierno de Núñez Feijóo aprueba la Ley de protección y bienestar de los animales de compañía que prohíbe las mutilaciones estéticas, el sacrificio con la sola decisión de los propietarios y sanciona económicamente no solo el maltrato con violencia sino también el causado por unas malas condiciones higiénico sanitarias, entre otros.
El Gobierno gallego acaba de aprobar la Ley de protección y bienestar de los animales de compañía que busca, según el presidente Alberto Núñez Feijóo, "luchar al máximo contra el maltrato animal y el abandono" y además sensibilizar en la necesidad de preservar el bienestar animal. También ha anunciado que en Galicia se prohibirán los circos con animales salvajes, como ya ocurriera en Madrid. De lo que no se ha hablado es de las corridas de toros, objeto de gran polémica y cuya prohibición reivindican los colectivos animalistas.
Feijóo ha declarado que uno de los retos de la nueva ley es que Galicia sea "una comunidad libre" de abandono de animales de compañía y que tenga una de las legislaciones más avanzadas de la Unión Europea (UE). El nuevo texto tipifica de infracción grave el maltrato no solo el que implica violencia sino también el causado por unas malas condiciones higiénicas y sanitarias.
Sanciones
Aunque Feijóo no ha concretado la cuantía de las sanciones en casos de maltrato o abandono, ha asegurado que se mantienen en los términos de la ley vigente. De este modo, las infracciones leves serán multadas con 100 a 500 euros, las graves irán desde los 501 a los 5.000 euros y las muy graves serán penadas con importes que oscilan entre los 5.001 y los 30.000 euros. El personal funcionario de la Administración podrá hacer o participar en las inspecciones, además de los veterinarios.
Se prohíben las mutilaciones
Según la nueva norma, se prohíben las mutilaciones estéticas de los animales, como cortar el rabo a los perros. El nuevo texto prohíbe todo tipo de herramientas que vayan destinadas a impedir o limitar la movilidad de un animal, que les produzca daños o sufrimientos, o les impida mantener su posición normal.
Se obliga a dar de comer y beber a los animales mientras están siendo transportados y emplear equipos de carga y descarga que no supongan sufrimiento. Se prohíbe el transporte en maleteros totalmente cerrados y sin ventilación adecuada así como atarlos a vehículos de motor en marcha.
Los propietarios no pueden sacrificar
Otra novedad que recoge la normativa es la referente al sacrificio de un animal de compañía, que siempre será prescrito por un veterinario" en los supuestos y en las condiciones establecidas por la propia ley", y los propietarios no podrán hacerlo.
Para luchar contra el abandono, se fomenta la creación de casas de acogida con un régimen de acogimiento temporal con cuidado, atención y condiciones higiénico sanitarias garantizadas hasta que aparezca un adoptante.
Además, se prohíbe la compra de animales de compañía a menores de 16 años sin autorización de un tutor legal y se introduce la obligatoriedad de que todos los perros estén identificados mediante microchip e inscritos en el Rexistro galego de identificación de animales de compañía.
El presidente ha querido recalcar que este proyecto legislativo es fruto del diálogo y que se creará el Comité Consultivo para a Protección Animal en el que estarán representados la Xunta, la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), las asociaciones de protección y defensa de los animales, el Consello Galego de Colexios Veterinarios y entidades medioambientales.