Comienza la búsqueda del tesoro de la famosa Cámara de Ámbar oculta en un barco nazi
El barco nazi torpedeado y hundido a finales de la Segunda Guerra Mundial es el Karlsruhe y podría contener la 'Octava Maravilla del Mundo'.
La Cámara de Ámbar, un habitáculo instalado en el castillo real de Köninsberg (actual Kaliningrado) que Federico Guillermo I de Prusia regaló al zar Pedro el Grande a comienzos del siglo XVIII y que se conoce como la Octava Maravilla del Mundo, cayó en manos de los nazis al poco de invadir la Unión Soviética, en 1941. Los rusos intentaron ocultar las paredes de ámbar con un papel tapiz; pero los nazis sabían lo que había detrás de la cubierta y procedieron a desmantelar la habitación, un proceso que les llevó 36 horas. Creyendo que el regalo prusiano les pertenecía, empacaron los paneles de ámbar en 27 cajas y las enviaron a Alemania. Pero el contenido de la mítica cámara desapareció en 1945 y jamás se ha vuelto a saber nada más de ella.
El destino de esa obra de gran valor arquitectónico y que tardó 10 años en completarse, sigue siendo un misterio. Ahora, un equipo de buzos tácticos de la empresa Baltictech se lanzarán al agua en los próximos días, a 100 metros de profundidad y a 65 kilómetros de la costa de Polonia, en el Mar Báltico con objeto de encontrar ese preciado tesoro.
El equipo espera así descubrir el contenido de la Cámara de Ámbar perdida, una sala adornada de paneles hechos de seis toneladas de ámbar y muchísimas piedras semipreciosas. Fue diseñada en 1701 por el escultor barroco Andreas Schülter y medía alrededor 55 metros cuadrados. Actualmente valdría la friolera de 176.000.000 dólares.
Según los documentos oficiales de carga del barco, había 360 toneladas de mercancías a bordo, antes de que fuera alcanzado por un torpedo del HMS Truant y hundido en abril de 1945.
¿Se hallará a bordo la Octava Maravilla del Mundo?