Muy Interesante

Santorini y la Atlántida

¿Pudo hundir la Atlántida la explosión de la isla de Thera, actual Santorini? Se trata de una de las islas Cícladas pertenecientes a Grecia. Al ser una isla volcánica, lo que realmente queda en la actualidad es sólo la ladera de un cráter.

El nombre de la isla (Santorini) procede de Santa Irene. Desde la capital de la isla, Fira, puede verse perfectamente el antiguo cráter, con un diámetro de más de 10 km. Se sabe que el volcán explosionó varias veces y la más antigua de la que tenemos constancia fue entre los siglos XVII y XVI a.C. La explosión tuvo que ser tremenda y debió producir un gran tsunami. Para que nos hagamos una idea, una de las explosiones más conocidas es la del volcán Krakatau –que antes escribíamos Krakatoa–, cuyo tsunami produjo la muerte de varias decenas de miles de personas. EL cráter del Krakatau tan sólo tenía un área de 20 km cuadrados, mientras que Santorini llega a los 82. Por tanto, la explosión tuvo que ser prodigiosa. Al sur de la isla había una población a la que se ha dado el nombre de Akrotiri. Era una gran ciudad en la que se han encontrado pinturas y edificios de tipo minoico. Es una villa que reposa debajo de 30 metros de cenizas volcánicas, por lo que queda así demostrado que la explosión tuvo que ser gigantesca.

Bajo el volcán

A más de 100 kilómetros al sur de Santorini se encuentra Creta. Los estudios recientes han demostrado que muchos edificios antiguos se derrumbaron en una fecha que coincide con la explosión del gran volcán. El arqueólogo Spyridon Marinatos defiende que lo que acabó con la civilización minoica fue la explosión de Santorini. El geólogo griego Angelos Galanopoulos fue más lejos que Marinatos y publicó un libro en el que se decía que el mito de la Atlántida de Platón tan sólo se hacía eco de la explosión del volcán griego. Claro que, para ello, hay que contradecir al filósofo en las fechas, pues se trata de una explosión que ocurrió 1.100 años antes del propio nacimiento del pensador y no 9.000 años antes, como dice Timeo. Además, en vez de ser una isla de gran tamaño, sus dimensiones se reducen a 82 km². El problema de Galanopoulos es el de todos los que quieren ubicar a la Atlántida en el Mediterráneo: hay que cambiar las fechas, la ubicación y las dimensiones. Con tanta variación, poco queda que pueda ser original. Esto lo expresa magnificamente bien el escritor L. Sprague de Camp: “Usted no puede cambiar todos los detalles de la historia de Platón y todavía pretender que se trata de la historia de Platón. Es como decir que el legendario Rey Arturo es realmente Cleopatra; todo lo que usted tiene que hacer es cambiar el sexo de Cleopatra, la nacionalidad, el período en que vivió, el temperamento, el carácter moral y otros detalles y el parecido se hace obvio” . Por Félix Ares

La ventana a un mundo en constante cambio

Muy Interesante

Recibe nuestra revista en tu casa desde 39 euros al año

Suscríbete
Suscripciones a Muy Interesante
tracking