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Los seat-filler o "llenabutacas" son extras y aspirantes a actores que la Academia de Hollywood contrata para hacer bulto durante la gala de los Oscar. Su cometido es sentarse en los asientos que dejan libres las estrellas cuando abandonan su puesto para recibir un premio o ausentarse en los intervalos de publicidad, para que en la retransmisión televisiva no aparezcan huecos en las butacas.
Los requisitos para este trabajo son tener buena planta y saber llevar un esmoquin o un vestido de gala. Cuando el invitado vuelve, hay que levantarse al momento. Está prohibido hablar con la estrella que le toque a uno al lado, a menos que ésta lo haga primero... y nada de pedir autógrafos.



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