¿Es Kassandra un personaje históricamente correcto en AC Odyssey?
La presencia de este personaje femenino y de la opción de poder elegir el sexo del protagonista ha sido tan aplaudida como criticada.
Aviso: Aunque este artículo busca comentar algunas curiosidades de ‘Assassin’s Creed Odyssey’, incluye spoilers de la trama y el videojuego. Seguid leyendo bajo vuestra responsabilidad.
Cualquier fan de la saga Assassin’s Creed no podrá negar que los vientos han cambiado y la serie creada por Ubisoft ha dado un intenso lavado de cara a uno de sus títulos más exitosos. Los elementos tradicionales que definían las distintas entregas de este videojuego se han ido desdibujando y las últimas dos entregas han acabado por cortar cabos con muchos de los pilares icónicos que lo hacían reconocible. Este tipo de sagas se mueve en un limitado margen entre el respeto a sus características clásicas y la innovación en cada entrega.
En ese escueto margen, ‘Assassin’s Creed Odyssey’ decidía convertirse en un RPG que permitía que fuese el jugador quien decidiera cómo jugar, qué historia vivir e incluso a través de qué ojos. Este elemento de libre albedrío, que se ha convertido en una apuesta segura para los videojuegos en los últimos años, ha provocado gestos de indignación entre los fans porque este nuevo elemento parece contradecir la propia trama de la saga y las culpas han recaído sobre la pobre Kassandra, el avatar femenino que podremos elegir. Nosotros hemos decidido romper una lanza por esta guerrera espartana.
Las críticas, más allá de temas de sexo en los que no vamos a entrar, vienen principalmente de dos argumentos muy claros: el personaje no es históricamente correcto y el poder elegir este tipo de aspectos contradice lo establecido en otras entregas.
La primera queja es parcialmente correcta. No era común ver a mujeres empuñando una espada en el mundo antiguo y, aunque había excepciones, la guerra se consideraba un asunto de hombres. El equipo creativo eligió sabiamente al pueblo espartano, ya que es una de las pocas sociedades de la Edad Antigua en la que las mujeres gozaban de independencia, capacidad de decisión y participación en la vida pública.
La concepción espartana se basaba en el ideal del guerrero y por ello los hombres centraban sus actividades en la guerra y el gobierno. Aspectos como la organización económica y administrativa, la posesión de tierras o la educación de los niños en los primeros años eran responsabilidad de las mujeres espartanas, a las cuales también se les permitía intervenir en política y opinar sobre los problemas de la polis. Además, Esparta era el único lugar de toda Grecia donde las mujeres podían competir en los torneos deportivos y eran sometidas a duros entrenamientos físicos para fortalecer su cuerpo y que sus hijos heredaran su vigor y fortaleza.
Partiendo de esto, no parece tan extraño que Kassandra sea una guerrera y mucho menos si se tiene en cuenta su historia. El personaje principal es, sin importar el sexo, un niño perteneciente a la familia del rey Leónidas que debe abandonar Esparta y exiliarse para salvar la vida. Si nos ponemos en el caso de Kassandra, parece plausible la explicación dada en el videojuego según la cual fue tratada como un varón y recibió el mismo entrenamiento en combate que se reservaba a los hombres. Estamos ante una situación excepcional en la que la protagonista vive una variación de la ley espartana debido a su situación personal.

AC Odyssey
El otro gran problema para muchos fans era la ruptura con algunos elementos previos de la saga. Assassin’s Creed se basa principalmente en que una persona de la actualidad revive la historia de alguien del pasado a través de una máquina (el Anymous). Al principio, era necesario que ambos sujetos tuvieran la misma sangre y uno fuera el antepasado del otro pero eso cambió y la propia trama eliminó ese requisito al quitarse de en medio a Desmond Miles (requiescat in pace). Lo que estaba claro es que el jugador no podía cambiar los hechos ocurridos, sino solo ser testigo del curso de la historia.
Eso es precisamente lo que parece chocar con la mecánica RPG en la que podemos no solo elegir el sexo del protagonista, sino también tomar decisiones a lo largo de la historia que afectarán al devenir de los acontecimientos. La selección de sexo parece parcialmente aceptable ya que el videojuego informa que los restos del legendario mercenario espartano que utilizarás para revivir su vida están muy deteriorados y no se puede identificar su sexo. Como el Anymous crea un mundo virtual, es capaz de generar dos avatares distintos con ambas opciones y dejar que sea el jugador quien decida. No son dos historias distintas ni realidades paralelas, simplemente una incógnita que el programa cubre con los parámetros que prefiere el usuario.
Al final de la historia se descubrirá que tenemos un hermano o hermana gemelo de sexo opuesto (la opción que hayamos descartado al principio), por lo que ambos personajes existieron realmente pero, al no poder identificarlos, el Anymous adapta la visualización. La historia es la misma, el protagonista una simple cuestión de preferencias.
Y en cuanto al tema de las decisiones, es más delicado pero también se le puede dar una explicación razonable. Muchos recordamos la advertencia “Etzio no mataba ciudadanos” que saltaba en los primeros juegos cuando se nos iba la mano con la espada. Solo ese detalle ya serviría para probar que la recreación sí que permitía al jugador salir de lo hecho por su antepasado y, por lo tanto, ahora también podría tomar decisiones más allá de la historia.
La otra explicación es mucho más sencilla. Esos puntos de inflexión que nos plantea el juego no son para el personaje, sino para el jugador. La decisión que nosotros tomemos será la que en su momento tomó Kassandra o Alexios y por lo tanto no se cambiará la historia, ya que las otras opciones no habrán existido más allá del pensamiento del protagonista. En un juego que une los acontecimientos históricos con la personalización solo podemos pensar que las decisiones que nosotros tomamos son las que tomó en su momento el personaje.
Si nos ponemos a analizarlos con detenimiento, en el mundo gamer, son pocos los videojuegos que no tendrán ni el mínimo agujero de guion o sinsentido en su historia. Pero ¿quién quiere ser racional y sensato en un videojuego? Disfrutemos de esas absurdas historias que nos entretienen durante tantas horas y de los detalles que nos permiten hacer nuestras esas aventuras. Disfrutemos de Kassandra o de Alexios, pero disfrutemos.