Lawrence Krauss: 'El universo será viejo, oscuro y vacío'
Hemos charlado con el físico y divulgador norteamericano que contribuyó a crear el concepto de energía oscura.
En 1995, Lawrence Krauss escribió junto con Michael Turner el artículo The Cosmological Constant is Back (La constante cosmológica ha vuelto). El título se refiere a un concepto acuñado por Albert Einstein para evitar una consecuencia de la teoría de la relatividad: la inestabilidad y el consiguiente colapso gravitatorio del universo. Como no sabían qué hacer con ese apaño, los cosmólogos optaron por dar a la constante un valor de cero y suprimirla de las ecuaciones. Pero Krauss planteó la posibilidad de que en realidad correspondiera a un tipo de fuerza que permearía el espacio. Solo tres años después, dos equipos distintos observaron que el universo se estaba expandiendo, y a una velocidad cada vez mayor: había que tomar muy en serio la noción de energía oscura, la presunta responsable de esa 'huida hacia delante'.
Nacido en 1954 en Nueva York, Krauss es físico teórico y dirige actualmente el Proyecto Orígenes de la Universidad Estatal de Arizona. También ha destacado por sus contribuciones a la divulgación, como demuestran sus libros Un universo de la nada y el reciente La historia más grande contada... hasta ahora, ambos publicados por la editorial Pasado & Presente.
¿No hay ninguna contradicción en que algo surja de la nada, como ha escrito en su penúltimo libro?
Ocurre todo el tiempo en el ámbito diminuto de la mecánica cuántica. Cuando enciendes una bombilla, los átomos emiten fotones que se crean en su interior; es decir, hay una transición. Si combinamos la mecánica cuántica y la relatividad, descubriremos que el espacio vacío es inestable y está atestado de partículas virtuales que brotan de ninguna parte. Y cuando se aplica la gravedad, algunas incluso pueden cobrar existencia. Es decir, el vacío produciría parejas de partículas y antipartículas virtuales que se vuelven reales, como ocurriría en los agujeros negros [se refiere a la llamada radiación de Hawking, cuando una de esas partículas quedaría atrapada por la gravitación, mientras que su par escaparía].
Según la física clásica, el espacio vacío equivale a la nada, mientras que para la mecánica cuántica aquel está lleno de cosas. Todo el universo probablemente tiene una energía total igual a cero, por lo que los procesos cuánticos asociados con la gravedad podrían, en principio, causar que brotara de forma espontánea un cosmos entero sin violar la ley de conservación de la energía.
A partir de la relatividad se concluye que al principio del cosmos había una singularidad. Sin embargo, esto podría entenderse como que las teorías simplemente no funcionan en ese punto.
Contamos con centenares de pruebas de que el big bang efectivamente se produjo, y podemos hablar con argumentos de lo que ocurrió durante el primer segundo del universo. De todos modos, necesitamos una teoría cuántica de la gravedad para describir qué pasó exactamente al inicio de todo.
¿Y cuál es el futuro del universo?
Se cree que, en un momento dado, los protones se desintegrarán, pero esto solo ocurrirá cuando el cosmos sea muy anciano; disponemos de mucho tiempo para prepararnos.
Antes de que eso ocurra, el Sol, convertido en una estrella gigante roja, se tragará a la Tierra, quizá dentro de unos 2.000 millones de años. En último término, la materia acabará desintegrándose y quedará un universo viejo, oscuro y vacío.
Puedes leer la entrevista completa a Lawrence Krauss, realizada por Roger Corcho, en el número 430 de Muy Interesante.
Si quieres conseguir este ejemplar, solicítalo a suscripciones@gyj.es o descárgatelo a través de la aplicación de iPad en la App Store. También puedes comprarlo a través de Zinio o de Kiosko y Más.
Y si deseas recibir cada mes la revista Muy Interesante en tu buzón, entra en nuestro espacio de Suscripciones.