¿Surgió el Universo de un agujero negro?
Eso parece sugerir un nuevo estudio llevado a cabo por el Instituto Perimeter de Física Teórica (Canadá), que afirma que nuestro Universo forma parte de otro universo de dimensiones superiores.
Eso parece sugerir un nuevo estudio llevado a cabo por científicos del Instituto Perimeter de Física Teórica (Canadá), en sintonía con la teoría del multiverso o coexistencia de múltiples universos más allá del observable, siendo este parte de otro universo de dimensiones superiores. Según sus conjeturas, el Big Bang o gran cataclismo que desencadenó la expansión del cosmos, habría sido simplemente el "espejismo" proyectado en un mundo tridimensional del colapso de una estrella en un universo de cuatro dimensiones, que al convertirse en agujero negro, expulsó la materia que dio a luz a nuestro propio Universo.
La teoría del Big Bang, cada día más evidenciada gracias a la reciente detección de las ondas gravitacionales primordiales, si bien explica el origen del Universo, plantea una gran interrogante: ¿qué provocó la explosión inicial? El modelo estándar de la física dice que esta surgió de un único punto hiperdenso, también llamado singularidad espaciotemporal. Sin embargo, los científicos canadienses encuentran improbable que de la caótica destrucción de una singularidad surgiese un universo predecible y uniforme como el nuestro.
Frente a esta hipótesis, los autores del trabajo afirman que el Universo irrumpió en su existencia cuando una estrella en un universo de cuatro dimensiones colapsó en un agujero negro. En un universo 3D como el nuestro, un agujero negro está delimitado por el “horizonte de sucesos”, cuya frontera es un objeto bidimensional, es decir, una superficie. Por el contrario, en un universo hiperespacial (de 4 o más dimensiones), el horizonte de sucesos de un agujero negro sería un objeto 3D. Mediante la simulación de la muerte de una estrella 4D, los investigadores descubrieron que la materia expulsada en el colapso formaba una “brana” tridimensional en torno al horizonte de sucesos, que se expandía muy lentamente; eso sería exactamente nuestro cosmos, el residuo de un colapso gravitatorio en un universo mayor, esparciéndose en todas direcciones.
El nuevo modelo, comprobable matemáticamente según los investigadores, plantea preguntas tan interesantes como si cada estrella que colapsa en un agujero negro introyecta un nuevo universo o si existen universos de dimensiones infinitas, con lo que ello puede suponer.