Los 50 mejores libros de todos los tiempos
¿Te gusta leer? Aquí tienes nuestras recomendaciones: distintas temáticas y autores variados para hacer más llevaderos estos días en casa.
No hay nada más bonito que tener uno de los mejores libros entre manos, impregnarse del olor de sus páginas y bañarse en su mar de sabiduría. Porque leer es aprender, pero sobre todo, porque leer es uno de los mayores placeres a los que aspiramos. Nos proyectamos en la lectura, nos vemos reflejados y establecemos una relación cómplice con los protagonistas. Es sencillamente maravilloso.
La lectura nos forma como personas; nos esculpe, nos define. Gracias a ella adoptamos un sentido crítico de la realidad circundante y, sobretodo, cultivamos nuestro mundo interior. Leyendo aprendemos a estar con nosotros mismos, por lo que invertir parte de nuestro capital en la obtención de uno de los mejores libros de la historia siempre es una magnífica opción.
Todas las obras de la lista han sido traducidas a decenas de idiomas —incluso a centenares— a lo largo de su recorrido. De este modo, sus páginas se han extendido universalmente y lectores de todas las partes del mundo han podido interactuar con sus escritores. Ten en cuenta que se excluyen de la lista obras religiosas o políticas distribuidas de manera gratuita. Aquí van los 50 mejores libros o, al menos, los más vendidos de todos los tiempos:
- Don Quijote, Miguel de Cervantes
- Historia de dos ciudades, Charles Dickens
- El Señor de los Anillos, J. R. R. Tolkien
- El principito, Antoine de Saint-Exupéry
- El hobbit, J. R. R. Tolkien
- Sueño en el pabellón rojo, Cao Xueqin
- Triple representatividad, Jian Zemin
- Diez negritos, Agatha Christie
- Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas, Lewis Carroll
- El león, la bruja y el armario, C. S. Lewis
- Ella, Henry Rider Haggard
- El código Da Vinci, Dan Brown
- El guardián entre el centeno, J. D. Salinger
- El Alquimista, Paulo Coelho
- El camino a Cristo, Ellen G. White
- Heidi, Johanna Spyri
- El libro del sentido común del cuidado de bebés y niños, Dr. Benjamin Spock
- Ana de las Tejas Verdes, Lucy Maud Montgomery
- Belleza Negra, Anna Sewell
- El nombre de la rosa, Umberto Eco
- El informe Hite, Shere Hite
- La telaraña de Charlotte, E. B. White
- El cuento de Perico, el conejo travieso, Beatrix Potter
- Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, J. K. Rowling
- Juan Salvador Gaviota, Richard Bach
- Un mensaje a García, Elbert Hubbard
- Ángeles y demonios, Dan Brown
- Así se templó el acero, Nikolai Ostrovsky
- Guerra y paz, Lev Tolstoi
- Las aventuras de Pinocho, Carlo Collodi
- Usted puede sanar su vida, Louise Hay
- Kane y Abel, Jeffrey Archer
- 50 sombras de Grey, E. L. James
- Diario de Ana Frank, Anne Frank
- En sus pasos, Charles M. Sheldon
- Matar a un ruiseñor, Harper Lee
- El valle de las muñecas, Jacqueline Susann
- Lo que el viento se llevó, Margaret Mitchell
- Cien años de soledad, Gabriel García Márquez
- Una vida con propósito, Rick Warren
- El pájaro espino, Colleen McCullough
- Piense y hágase rico, Napoleón Hill
- La rebeldía de la Sra. Stover, William Bradford Huie
- Los hombres que no amaban a las mujeres, Stieg Larsson
- La oruguita glotona, Eric Carle
- El diario de Greg, Jeff Kinney
- Princesa mecánica, Cassandra Clare
- ¿Quién se ha llevado mi queso?, Spencer Johnson
- El viento en los sauces, Kenneth Grahame
- 1984, George Orwell
No puede acabar este post sin hacer mención honorífica a autores como Shakespeare, Dostoyevski, Whitman, Goethe, Dante, Borges, Kafka o Proust (entre otros), que no aparecen en la lista pero se inscriben dentro de los grandes escritores de la literatura universal.
Los libros son nuestro bien más preciado. Nos proporcionan las herramientas necesarias para reflexionar y comprender, tanto a nosotros mismos como al mundo exterior. Y es que ya lo decía el maestro Umberto Eco: “Los libros se respetan usándolos, no dejándolos en paz”.