¿Tiene que haber límites éticos a la fecundación in vitro?
Acudir a la reproducción asistida ha permitido ser madres a muchas mujeres, pero no está exento de complicaciones, sobre todo a partir de ciertas edades.
Desde el punto de vista clínico, las intervenciones en reproducción asistida son poco invasivas y sin apenas riesgo, pero “quien se somete a uno de estos tratamientos no tiene la misma actitud que quien se quita una piedra de un riñón”, según Marta Barrio, directora de Comunicación del Instituto Madrileño de Fertilidad (IMF). Por eso, la ayuda psicológica es una herramienta cada vez más usada en este campo.
La citada clínica es pionera en impartir talleres terapéuticos y charlas para ayudar a los padres a gestionar el estado emocional en que se encuentran, al estar buscando un hijo que no pueden conseguir por las vías tradicionales. “Aquí ponen en común sus inquietudes con otras personas en su misma situación y plantean dudas que no se atreven a preguntar en la consulta. Así los pacientes ven que su problema no es exclusivo de ellos”, explica Barrio.
La edad es uno de los factores que más inseguridad produce a las futuras madres, pues muchas acuden a la FIV habiendo rebasado con creces el periodo natural. Casos como el de la gaditana Carmen Bousada de Lara, que el 29 de diciembre de 2006 dio a luz a mellizos pocos días antes de cumplir 68 y murió de cáncer dos años después, alimentan el debate sobre los límites médicos, éticos y legales para acceder a la maternidad.
Bousada alcanzó repercusión mundial al convertirse en la madre más anciana del mundo, después de haberse sometido a un tratamiento de fertilidad en una clínica de Los Ángeles, donde reconoció que había mentido con su edad, ya que el límite legal para ello era de 55 años. Fruto del tratamiento, nacieron en la clínica de Sant Pau de Barcelona los gemelos Pau y Christian, que pesaron 2,1 y 2,3 kilos respectivamente.
El episodio fue objeto de gran controversia. En una entrevista que concedió al rotativo inglés News of the world un mes después de dar a luz, Bousada decía que se le erizaba el pelo cuando le preguntaban por el futuro de sus hijos. Sin embargo, añadía que su madre había vivido 101 años y que no veía ninguna razón para que a ella no le pasara lo mismo. La realidad, sin embargo, fue diferente, y el cáncer solo le permitió disfrutar de su maternidad durante dos años. Murió a los 70, en julio de 2009.
Más información en el reportaje Nuevas fronteras de la fecundación in vitro, escrito por Pablo Linde. Puedes leerlo en el número 417 de Muy Interesante.
Si quieres conseguir este ejemplar, solicítalo a suscripciones@gyj.es o descárgatelo a través de la aplicación de iPad en la App Store. También puedes comprarlo a través de Zinio o de Kiosko y Más.
Y si deseas recibir cada mes la revista Muy Interesante en tu buzón, entra en nuestro espacio de Suscripciones.