
El Arteon sigue mejorando
La berlina coupé Volkswagen Arteon se actualiza y se comercializará también en variante Shooting Brake y con propulsión híbrida enchufable.
El Volkswagen Arteon es de esos vehículos que, por pocos que veamos en nuestras carreteras, deseamos que se mantengan en ella. Su silueta gran turismo, elegante y vanguardista, nos conquistó en 2017, cuando se presentó como la alternativa al Volkswagen Passat. De corte más deportivo y techo coupé, llegó para competir contra alternativas como el Audi A5 Sportback. Tres años más tarde le toca actualizarse, con ligeras modificaciones estéticas y la introducción de la nueva carrocería Shooting Brake a su gama. Tampoco faltará la variante deportiva R, inédita en este modelo, y una versión híbrida enchufable que firma 218 CV y que ya monta el Passat.
Los cambios estéticos no son destacables así que tendremos que hacer un esfuerzo por diferenciarlos. La parrilla tiene una lama menos, de modo que ambas coinciden con las líneas de luz diurna LED de los grupos ópticos delanteros. Estos faros siguen integrados en la calandra, una solución armoniosa y futurista a la vista que no era necesario modificar. Las unidades R tienen un paragolpes delantero y trasero específico para acentuar su carácter deportivo. Lo realmente novedoso es la carrocería Shooting Brake o familiar, una variante inexistente hasta la fecha. Su aparición no supone una mejora importante de la capacidad de carga así que la elección, entre una u otra opción, será estética. El modelo familiar tiene una capacidad de 565 litros frente a los 563 del fastback.
Con el lavado de cara mejora el equipamiento inicial de la gama, con un interior digitalizado desde el modelo de acceso. La pantalla central sigue manteniendo su ubicación por debajo de las rejillas de ventilación pero la climatización pasa a controlarse mediante botonería táctil capacitiva. En el apartado mecánico se introduce la mecánica híbrida enchufable presentada en el Passa GTE y la versión R de 320 CV de potencia. Ambas son alternativas al motor 2.0 gasolina de 190 y 280 CV o al diésel 2.0 de 150 y 200 CV. Los bloques irán, de manera obligatoria, unidos al cambio automático y la tracción integral (si superan los 200 CV). Llegará durante el segundo semestre de este caótico 2020 de COVID-19 pero todavía no tenemos información sobre su precio o la autonomía eléctrica de la variante eHybrid.

Se trata de un restyling así que mantiene las siguientes dimensiones: 4,86 metros de largo por 1,87 de ancho y 1,43 de alto. Su batalla de 2,84 metros lo convierten en un modelo realmente confortable tanto para las plazas delanteras como la fila posterior de asientos.

Una de las novedades más importantes de esta actualización es la aparición de la carrocería Shooting Brake o familiar. Esta silueta alarga el techo hasta el portón, sin la caída coupé que caracteriza a la opción fastback. El pequeño alerón pasa a estar en la parte superior de la luneta trasera y la cintura lateral se eleva para parecer más deportivo.

Podría parecer que el Shooting Brake ofrece más maletero pero apenas hay diferencias. Este modelo tiene una capacidad de 565 litros, que puede ampliarse a 1 632 si abatimos los asientos traseros. El coupé nos ofrece 563 litros de capacidad y 1 557 litros respectivamente. La decisión dependerá de nuestros gustos.

Cuando se presentó el Arteon en 2017, lo hizo con un diseño futurista y muy atemporal, capaz de sobrevivir al paso del tiempo sin verse desfasado. Su parrilla ha perdido una lama horizontal pero ha ganado luz. Por primera vez, el Arteon puede incorporar un haz de luz LED en el centro de la parrilla del radiador (opcional o modelos R).

Las motorizaciones son otra de sus novedades, empezando por la variante independiente R. El bloque de 320 CV de potencia, cambio automático y tracción total está disponible en ambas carrocerías. Esta versión cuenta con el R-Performance Torque Vectoring, un sistema que distribuye la potencia entre los ejes y elige la rueda trasera que más par requiere de forma instantánea.

Los modelos R incorporan dos entradas de aire en negro brillante además de las llantas de 20 pulgadas, el sistema de frenos en azul y los embellecedores negros. El sistema de escape ha sido concebido especialmente para esta berlina con las salidas trapezoidales (reales) presentes en el difusor. El interior luce el estilo Black Carbon con elementos deportivos, asientos semibaquet en napa con el logo R en azul y volante deportivo, entre otros detalles.

El salpicadero ha sido rediseñado, tanto a nivel de distribución como de materiales utilizados. El tablero de instrumentos pasará a ser siempre digital, incluso en los niveles de equipamiento de acceso. La pantalla central seguirá teniendo 8 ó 9,2 pulgadas en función del acabado y se podrá disfrutar del sistema Harman/Kardon de serie.

En este último lavado de cara han desaparecido los pocos botones que quedaban en el Arteon. La climatización pasa a controlarse mediante superficies táctiles capacitivas y desaparece el reloj analógico que presidía la zona central del salpicadero, mucho más limpio y recto.

La variante híbrida enchufable se nutre del propulsor gasolina TSI de 156 CV junto a un bloque eléctrico de misma potencia (85 kW). Ambos rinden una fuerza conjunta de 218 CV con posibilidad de circular en modo cero emisiones. Todavía no sabemos la autonomía ofrecida al activar el modo eléctrico pero, en el Grupo Volkswagen, suele rondar los 55-60 kilómetros.

La batería del Arteon tiene una capacidad de 13 kWh y se encarga de que el motor eléctrico aporte un extra de energía en el modo de conducción eHybrid. Si el conductor quiere disfrutar de la conducción deportiva, puede optar por le modo GTE, ideado para exprimir ambos motores.

Como es habitual, el modelo híbrido enchufable puede conectarse con el smartphone del propietario mediante la aplicación We Connect. A través de esta app se sabe la autonomía restante y se podrá activar la carga a una hora determinada o encender el aire acondicionado o calefacción antes de un viaje.

El Arteon se ha convertido en el buque insignia de la firma y por ello incorpora todas las ayudas a la conducción disponibles en la marca. La principal novedad es el Travel Assist, un sistema que permite la conducción autónoma hasta los 210 km/h con el control del conductor. Gracias al control de velocidad predictivo y otros sistemas, el vehículo es capaz de circular de manera natural.