Arqueología del trabajo

Los íberos gozaban de un sistema de vida estable y especializado, basado en la agricultura y la ganadería. Los autores nos proponen una aproximación a su mundo desde la óptica de la vida cotidiana en un poblado imaginario. Analizando sus actividades económicas y los procesos de trabajo, podemos reconstruir los modos de vida del pasado, que suscitan cada vez mayor interés entre la gente. Y así, Chapa y Mayoral nos ilustran sobre sus actividades cotidianas: cómo hilaban y tejían, cultivaban lentejas, guisantes o higos, producían el vino y el aceite, adiestraban a sus perros para el pastoreo, fundían el hierro para fabricar sus herramientas y armas, dedicaban sacrificios a los dioses, usaban el trillo, modelaban figuras y recipientes, construían casas y caminos, curtían pieles, horneaban sus cacharros o contaban cuentos a la luz de la lumbre para que, de generación en generación, nos llegara su hálito de vida, que es el nuestro.
Palma Lagunilla