Nuestros pasos son predecibles en un 93%

Para demostrarlo, Barabási y su equipo estudiaron el movimiento de 50.000 usuarios anónimos de teléfonos móviles durante tres meses. Y comprobaron que aunque tenemos la sensación de que nuestras acciones son aleatorias, en realidad seguimos unos patrones sorprendemente regulares. ?Entendemos por predictibilidad la capacidad de saber donde estará un individuo en la próxima hora conociendo su trayectoria actual?, aclara Barabási, que la cifra en un 93%. Aunque la mayoría de los sujetos se desplazan en distancias cortas, y sólo unos pocos recorren regularmente cientos y miles de kilómetros, Barabási asegura que "independientemente del tiempo y la distancia todos ellos siguen un patrón y muestran una fuerte tendencia a regresar a lugares que ya han visitado antes".
La capacidad de predecir científicamente los movimientos humanos, aseguran los investigadores, podría aplicarse en la vida real para predecir la expansión de epidemias, planificar el crecimiento de las ciudades, o gestionar y mejorar el tráfico, entre otros.