Menos huracanes pero más intensos

Los autores, dirigidos por Morris Bender, han desarrollado modelos de predicción climática que muestran que, aunque el número total de huracanes de la cuenca atlántica en este siglo debería reducirse, se prevé que el número de tormentas de categoría muy intensa (entre 4 y 5) aumente. Incluso es posible que se dupliquen o tripliquen para el año 2100. Este fenómeno se podría atribuir al aumento de la temperatura de los océanos. Además, todo apunta a que la mayor concentración de huracanes intensos y destructivos en las próximas décadas se centrará en la región del Atlántico Occidental, por los que los investigadores advierten que la isla de La Española, Bahamas y la costa sudeste de los Estados Unidos podrían encontrarse bajo un mayor riesgo.
Los huracanes de intensidad 5 superan los 250 kilómetros por hora y son los más devastadores. El Katrina, que en 2005 golpeó a Nueva Orleans (EEUU), o el Mitch, que arrasó Centroamérica en 1998 y generó vientos de hasta 290 km/h, son algunos ejemplos.