Michael Collins: muere uno de los astronautas del Apolo 11
El astronauta que no pisó la Luna ha fallecido a los 90 años de edad a causa de un cáncer. Recordamos su historia.
El astronauta del Apolo 11 Michael Collins ha muerto a los 90 años después de una larga batalla contra el cáncer, según ha confirmado su familia a través de las redes sociales.
Collins formó parte de la tripulación de tres hombres que hizo historia con el aterrizaje en la Luna en 1969, pero a diferencia de Neil Armstrong y Buzz Aldrin, nunca caminó sobre nuestro satélite. Aunque viajó hasta la Luna, el astronauta se encargaba de pilotar el módulo de comando que orbitaba por encima de sus camaradas, y se llevó a casa una experiencia diferente y única de la misión.
"Lo que más recuerdo es la vista del planeta Tierra desde una gran distancia. Diminuto. Muy brillante. Azul y blanco. Brillante. Hermoso. Sereno y frágil", diría en una ocasión.
Collins fue uno de los integrantes del tercer grupo de astronautas nombrado por la NASA en octubre de 1963. En 1966, ejerció como piloto en la misión Gemini 10 de 3 días, durante la que estableció un récord mundial de altitud y se convirtió en el tercer caminante espacial de la nación, completando dos actividades extravehiculares.
Se suponía que Collins volaría en el Apolo 8, pero la cirugía por una hernia de disco cervical requirió que le sustituyeran, y luego fue asignado como piloto del módulo de comando para el Apolo 11, lo que significó un reentrenamiento extenso.
Su segundo vuelo fue como piloto del módulo de comando de la histórica misión Apolo 11 en julio de 1969. Permaneció en órbita lunar a bordo del CSM Columbia mientras Neil Armstrong y Buzz Aldrin descendieron en el módulo lugar Eagle y se convirtieron en los primeros hombres en caminar sobre la Luna. Mientras tanto, Collins se había convertido en la persona más aislada de la historia, muy lejos de cualquier otro ser humano.
En estas 21 horas que estuvo solo en la nave, llevó a cabo un mantenimiento de rutina e intentó detectar el módulo lunar desde la órbita. La misión fue todo un éxito y los tres astronautas volvieron como héroes a la Tierra.
Una vez en Los Ángeles, Collins recibió junto a sus compañeros la Medalla Presidencial de la Libertad, el honor civil más alto de Estados Unidos.
Multitud de declaraciones de pésame
La familia Collins compartió un sentido mensaje tras su fallecimiento: “Lamentamos compartir que nuestro amado padre y abuelo fallecieron hoy, luego de una valiente batalla contra el cáncer. Pasó sus últimos días en paz, con su familia a su lado. Mike siempre enfrentó los desafíos de la vida con gracia y humildad, y enfrentó este, su desafío final, de la misma manera. Lo vamos a extrañar muchísimo”.
Su compañero de viaje lunar, Buzz Aldrin, también le ha dedicado unas emotivas palabras en su cuenta de Twitter:
Y estas son las palabras del administrador interino de la NASA, Steve Jurczyk, sobre el fallecimiento de Michael Collins:
“Hoy la nación perdió a un verdadero pionero y defensor de toda la vida de la exploración en el astronauta Michael Collins. Como piloto del módulo de comando del Apolo 11, algunos lo llamaron "el hombre más solitario de la historia. Michael siguió siendo un incansable promotor del espacio. Sus propios logros característicos, sus escritos sobre sus experiencias y su liderazgo en el Museo Nacional del Aire y el Espacio ayudaron a obtener una amplia exposición del trabajo de todos los hombres y mujeres que han ayudado a nuestra nación a alcanzar la grandeza en la aviación y el espacio. No hay duda de que inspiró a una nueva generación de científicos, ingenieros, pilotos de pruebas y astronautas. La NASA lamenta la pérdida de este piloto y astronauta consumado, un amigo de todos los que buscan ampliar el potencial humano. Ya sea que su trabajo esté detrás de escena o a la vista, su legado siempre será como uno de los líderes que dio los primeros pasos de Estados Unidos en el cosmos. Y su espíritu nos acompañará a medida que nos aventuramos hacia horizontes más lejanos”.