Descubren una galaxia compacta que despejará dudas sobre el origen del universo
¿Cómo se produjo la llamada reionización cósmica?
Tras el Big Bang y la aparición de las primeras estrellas y galaxias, 1.000 millones de años después, el Universo volvió a sufrir un proceso de ionización cósmica. ¿Qué o quién fue el responsable de tal suceso?
Durante mucho tiempo, más de dos décadas, los astrónomos han reflexionado sobre ello, llegando a la conclusión de que fueron las galaxias las causantes de esta reionización. Ahora, un nuevo estudio internacional liderado por investigadores de la Universidad de Ginebra (Suiza) ha hallado una galaxia compacta con una emisión considerable de fotones ionizantes -claves en la transformación del universo-, lo que ayudará a despejar las dudas sobre los orígenes de nuestro universo.
Durante estos 20 años de investigación jamás se había descubierto ninguna galaxia que emitiera radiación suficiente como para dar peso a esta teoría.
Los astrónomos se centraron en las galaxias denominadas “guisante verde” descubiertas en 2007 y que forman parte de una clase poco frecuente y particular de estos conjuntos de estrellas, nubes de gas, planetas, polvo cósmico, materia oscura y energía de nuestro universo cercano. Si estas galaxias “guisante verde” son muy compactas pueden albergar explosiones estelares con la suficiente fuerza como para expulsar fotones ionizantes. Así, revisando la Sloan Survey (con más de un millón de galaxias indexadas), identificaron cerca de 5.000 galaxias que compartían las características de radiación UV muy intensa y solidez.
Una vez elegidas cinco de estas galaxias, lo siguiente fue emplear el telescopio espacial Hubble de la NASA/ESA para detectar la radiación UV, descubriendo que la galaxia J0925, situada a una distancia de 3.000 millones de años luz, era en realidad una “expulsión” de fotones ionizantes, con una intensidad jamás vista.
Concretamente la galaxia “guisante verde” hallada posee una firma particular, con su espectro Lyman-alfa mucho más estrecho y más potente que cualquiera de las galaxias conocidas. Este hallazgo representa así una nueva e interesante vía para confirmar la hipótesis más extendida en la comunidad científica y profundizar en los inicios del universo.
El estudio ha sido publicado en la revista Nature.