Así es como las NFT están transformando el mercado del arte
Se acabaron las galerías y los cuadros, el presente es virtual.
En una subasta en Londres el pasado 10 de diciembre, Christie's vendió un collage digital titulado Everdays: The First 5,000 Days por casi 60 millones de euros. La venta convirtió instantáneamente a Beeple, el creador de la obra, en uno de los artistas vivos más caros del mundo.
Pero esta enorme y exitosa venta en la subasta tuvo un pequeño y peculiar detalle, y es que la pieza de arte que se subastó en realidad no existe de forma material. En cambio, es un ejemplo de un "trabajo desmaterializado" conocido como token no tangible o NFT, por sus siglas en inglés.
Obras de arte que no se pueden tocar
Los NFT utilizan la tecnología blockchain para verificar objetos digitales como música, texto, videos, fotos o dibujos, lo que hace que cada objeto sea único. Esta verificación la realiza una red de ordenadores interconectados a lo largo y ancho de todo el mundo, y el proceso se considera inviolable e infalsificable.
Para hacer un NFT, puedes ir a una plataforma específica como Rarible u OpenSea, pagar una tarifa determinada en criptomonedas y cargar tu archivo digital allí. Una vez que el NFT está en la plataforma, el creador es libre de venderlo a cualquier comprador que esté dispuesto a pagar por él.
El mercado de NFT ha crecido muy rápidamente en todo el mundo, e incluso personas como el fundador de Twitter, Jack Dorsey, se han subido a este novedoso y lucrativo carro. A mediados del año pasado, Dorsey vendió su primer tweet como NFT por algo más de 2,4 millones de euros y se ha comprometido a donar la suma a diversas organizaciones benéficas.
En ciudades como Nueva York, el interés por las NFT ha llevado a la Superchief Gallery a inaugurar una exposición dedicada a las NFT habilitando un espacio físico, algo que contradice la propia esencia de los tokens. Para los fundadores de dicha galería, este nuevo formato es una oportunidad única para dar a los artistas digitales el reconocimiento y la recompensa adecuada por su trabajo.
Además, argumentan los defensores de los NFT, los tokens permiten proteger los derechos de autor de los artistas, algo muy importante, ya que si todos los creadores de NFT se involucran y se toman este negocio en serio, podrá expandirse a un nivel mucho mayor que el arte convencional.
Otro ejemplo reciente de venta exitosa de NFT es la que protagoniza Till Lindemann, el cantante de la banda alemana de metal industrial Rammstein, que también quiso llevarse tajada de este floreciente y lucrativo mercado. Los derechos de un video musical inédito se pusieron a la venta en Internet por 100.000 euros, y Lindemann ofreció no solo una, sino hasta 10 copias digitales del trabajo. Además, el cantante también se comprometió a ofrecerles a los compradores una cena exclusiva con él en un lujoso hotel de Moscú, que incluía los vuelos, el alojamiento y los visados para dos personas. En la obra en cuestión, Lindemann interpreta la famosa canción rusa Lubimy Gorod.