¿Cómo me puede ayudar una hipoteca verde a ahorrar en mis facturas?
Las viviendas sostenibles tienen mejor aislante, por lo tanto, sus propietarios notarán el ahorro en facturas como la de la luz o el gas
¿Aumentar las vinculaciones o pagar más interés? La mayoría de los bancos permiten disfrutar de unos tipos más bajos siempre que el usuario contrate una serie de productos: seguros, cuentas bancarias, alarmas de seguridad, etc. No obstante, existen futuros propietarios que no pueden permitirse adquirir tantos servicios.
Una posible solución es hacer los cálculos para poder asumir un interés algo más alto, pero lo cierto es que últimamente los bancos están ajustando los productos ofrecidos para adaptarse a los nuevos tiempos. Uno de los resultados son las conocidas como hipotecas verdes.
Hay que tener en cuenta que la sostenibilidad se ha convertido en la clave en muchos aspectos de la sociedad actual. Sin ir más lejos, una de las condiciones que exige la Unión Europea para que un país pueda recibir los fondos de recuperación (conocidos como ‘Next Generation EU’) es invertir en proyectos que luchen contra el cambio climático o la protección de la diversidad con el objetivo de conseguir una Unión Europea más sostenible.
Es por ello que algunos de los bancos han entendido la demanda y están impulsando las hipotecas verdes. Estos préstamos ofrecen a los usuarios unos intereses más bajos a cambio de adquirir una vivienda con certificado de eficiencia energética B o superior. Eso significa que por elegir la vivienda adecuada un futuro propietario se está rebajando el interés sin necesidad de vinculaciones.
No es la única ventaja que ofrecen las hipotecas verdes. De hecho, si el inmueble cuenta con un certificado energético B, A o A+ significa que sus dueños se ahorrarán dinero una vez que empiecen a vivir en el inmueble. Esto se debe a que el gasto energético de una vivienda que tiene dicho certificado se sitúa entre el 55% y el 75% (en caso de tener la categoría B) o por debajo del 55%.
Por lo tanto, las facturas de luz y gas que lleguen a esa vivienda serán más bajas que las de la media (se puede llegar a ahorrar hasta un 60%), es decir, sus propietarios estarán ahorrando incluso después de haber adquirido la propiedad.
Bancos con hipotecas verdes
Cada vez son más las entidades que cuentan con este tipo de hipotecas. Ejemplo de ello es Bankinter, que ofrece dos modalidades de hipoteca verde: fija (con periodo de amortización máximo de 20 años) y variable (plazo de 30 años). Si el inmueble tiene un certificado de eficiencia energética A o B podrá disfrutar de un TIN del 1,30% en el préstamo de tipo fijo o de un interés del euríbor+0,99% (1,99% el primer año) en caso de optar por una hipoteca variable.
BBVA, en cambio, tan solo ofrece una hipoteca verde de tipo fijo para las viviendas con calificación A o B. Los usuarios que cumplan dicha condición se beneficiarán de un TIN del 1,45% y una TAE del 2,31%.
Otra entidad que se ha sumado a las hipotecas verdes es Banco Mediolanum con su hipoteca Freedom Green. ¿A quién está dirigida? Podrán optar a ella aquellos que tengan intención de comprarse una vivienda con certificado energético A o superior. A cambio los futuros propietarios pagarán una hipoteca de tipo variable con un TIN del euríbor+0,99% (1,99% durante el primer año) y una TAE del 2,38%.
Asimismo, una de las entidades que más tiempo lleva ofreciendo hipotecas verdes es Triodos. El cliente puede optar por una hipoteca fija, variable o mixta de esta modalidad. Cualquier cliente puede pedir este préstamo, pero pagará más o menos intereses en función del certificado de eficiencia energética que tenga su propiedad. Eso significa que una persona con un inmueble con una calificación A o A+ pagará mucho menos que aquellos con una vivienda certificada como C o inferior.
En definitiva, la hipoteca verde es una buena alternativa para aquellas personas que quieran una hipoteca con buenas condiciones, pero sin adquirir muchos productos bancarios. Además, adquiriendo una vivienda con certificado de eficiencia energética B o superior ahorrarán en sus gastos habituales: luz, gas, etc.