Las claves de la digitalización de España
La Agenda España Digital 2025: ¿qué es y por qué es imprescindible para el futuro de España?
Recientemente se ha presentado la Agenda España Digital 2025 que constituye un ambicioso plan estratégico de 10 puntos y 48 acciones específicas para el avance digital de nuestro país. Nos encontramos probablemente, ante uno de los planes estratégicos más importantes de los próximos años.
Este plan cuenta con un amplio presupuesto de 140.000 millones de euros, de los cuales, 70.000 se desembolsarán en el primer período 2021-2023 bajo aportaciones públicas y privadas. En una segunda fase, se aportarán 50.000 millones más por parte del sector privado durante el período 2024-2025. Finalmente, el presupuesto se completa con otros 20.000 millones de euros, de los cuales, 15.000 proceden fundamentalmente del Fondo Europeo para la Reconstrucción y Resiliencia, también llamado Next Generation EU.
Los objetivos de esta Agenda Digital se enmarcan en el Marco Financiero Plurianual (MFP) 2021-2027 de la Unión Europea aprobado en julio de 2020, que a su vez se integra por dos grandes partidas:
- El Marco Financiero Plurianual en sí mismo (Consejo Europeo, 2020), correspondiente a este septenio -que asciende a 1.074,3 billones de euros-
- El Fondo para la Reconstrucción y Resiliencia post-covid -que incorpora otros 750.000 millones de euros.
El montante que la Unión Europea va a dedica en total por ambas partidas asciende a 1.824,3 billones de euros (Comisión Europea, 2020 a) (Consejo Europeo, 2020).
Para lograr los objetivos de la digitalización de Europa, se destinan a este fin, no sólo los fondos Next Generation EU antes mencionados, sino también otros fondos y programas del Marco Financiero Plurianual, tales como: Fondos Estructurales Europeos, Connecting Europe Facility, Horizonte Europa o el programa Europa Digital. Todas las partidas antes señadas procedentes de la Unión Europea se entregarán a fondo perdido en un 52%, mientras que tendrán un carácter crediticio el 48% restante.
Prioridades de la Agenda España Digital 2025
La Agenda -como hemos señalado- plantea 10 puntos estratégicos o metas y 48 acciones específicas. Las 10 líneas estratégicas contienen como temas clave:
- Garantizar la conectividad digital para el 100% de la población
- Liderar en Europa el despliegue de la tecnología 5G
- Reforzar las competencias digitales
- Reforzar la ciberseguridad
- Reforzar la digitalización de las administraciones públicas
- Acelerar la digitalización de PYMEs y start ups
- Digitalización del modelo productivo
- Inversión en el sector audiovisual
- Favorecer la inteligencia artificial y la economía basada en datos
- Garantizar los derechos de los ciudadanos elaborando una Carta de Derechos Digitales (Gobierno de España, 2020).
Este plan estratégico que en sí constituye la Agenda, precisará de un desarrollo legislativo y de un plan de acción para su implementación. El Plan cuenta con un Consejo Consultivo para la Transformación Digital de España que integra diversos actores: universidades y centros de investigación, sector privado, sector público y otros representantes de la sociedad en su conjunto.
La importancia de la digitalización
En un contexto de un mundo sometido a un cambio vertiginoso, Europa y España no pueden perder la carrera de la digitalización. Estados Unidos rivaliza con China no sólo geopolítica, diplomática, comercial, sino también y por encima de todo, digitalmente. La Cuarta Revolución Industrial está basada en la tecnología y quien quede atrás, perderá poder, potencialidad de crecimiento económico y, sobre todo, influencia mundial. La pandemia covid-19 ha puesto en primer plano la importancia estratégica de la digitalización: ha permitido que trabajemos, nos informemos, investiguemos, nos relacionemos, nos formemos, nos reunamos, compremos productos o servicios, gestionemos o asistamos a eventos culturales en formato virtual.
Durante la pandemia, la respuesta ha sido la tecnología. Según la estratégica Cumbre de la CEOE “Nuestro futuro común: empresas españolas liderando el futuro”, celebrado online durante los días 15 al 25 de junio de 2020, el confinamiento ha acelerado unos cinco años la velocidad de digitalización en España. Este dato prueba que la pandemia nos ha proporcionado una ventaja competitiva estratégica que como país no podemos perder.
¿En qué consiste la digitalización?
La digitalización es la transformación a ritmo vertiginoso de nuestro mundo, que se vincula al desarrollo de la Cuarta revolución Industrial. Según Boston Consulting Group (BCG), esta revolución implica el uso de 9 tecnologías diferentes: robots autónomos, simulación, integración de sistemas, internet de las cosas, ciberseguridad, nube, manufactura aditiva (impresoras 3D), realidad aumentada y Big Data.

IV Revolución Industrial
Una mención especial merece el 5G, que puede ser aplicada a todas las tecnologías anteriores. Según la UNCTAD -la Organización de Naciones Unidas para el Comercio y Desarrollo-, la tecnología 5G podría crear en el mundo 22 millones de empleos en 2035 y contribuir al PIB mundial en 13 billones dólares. En España, el empleo podría aumentar un 1,3% y aportar 35.000 millones al PIB nacional.
En este sentido, el Comisario Europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, señaló en la presentación de la Agenda España Digital 2025 que Europa está planificando la creación de una red propia europea basada en 5G en coordinación con los principales operadores digitales de la Unión. Sin duda, una buena noticia para poder posicionarnos mejor en este entorno global geopolítico y digital tan sumamente competitivo
Ventajas de la digitalización
España debe aprovechar la ventaja competitiva que el confinamiento nos ha proporcionado. España es la 11ª economía digital en Europa según el Informe Digital Economy and Society Index 2018. Se estima además una mejora considerable, ya que en 2025 seremos la 7ª potencia digital europea. Este informe pondera una serie de factores múltiples, como: la conectividad, el uso de internet, el capital humano, los sistemas de redes de telefonía e infraestructuras y los servicios públicos digitales.
Debemos tener en cuenta que la capacidad digital de España se pone de manifiesto, no sólo por la competitividad de las empresas tecnológicas, sino también por la fuerte digitalización de empresas de otros sectores, como pueden ser -por citar algunos ejemplos- Inditex, Repsol o CaixaBank.
Digitalización y sostenibilidad
El marco europeo plurianual plantea una interesante vinculación entre digitalización y sostenibilidad, siendo éstos sus dos pilares conceptuales básicos. A escala global antes del confinamiento, todos los organismos internacionales y regionales, gobiernos, empresas, tercer sector y la sociedad en general estábamos concienciándonos y trabajando intensamente para lograr un mundo más sostenible -en todas sus dimensiones, pero especialmente en la dimensión medioambiental, con el objetivo de reducir la polución y cuidar la vida en nuestro planeta-. Ejemplo de ello es el “European Green Deal” y la normativa aprobada en España en los últimos meses, como la “Ley de Economía Circular”, entre otras-. El confinamiento situó, como preocupación prioritaria, el cuidado de la salud y de las personas. Sin embargo, ambas realidades están profundamente unidas: en el origen del Covid-19 existe no sólo un problema sanitario, sino también medioambiental. Además, estudios recientes de la Universidad de Harvard han reflejado que el Covid-19 podría extenderse en mayor medida en áreas con intensa contaminación.
Junto a estas dos variables -digitalización y sostenibilidad- podemos añadir una tercera: internacionalización. No podemos dar respuesta a un reto global como es una pandemia, si no actuamos coordinadamente. No podremos ser más sostenibles si no nos digitalizamos; no podremos ser más influyentes en el mundo si no implementamos una adecuada estrategia.
Ahora bien ¿cómo incide la digitalización en la sostenibilidad? La digitalización se enmarca en el Objetivo de Desarrollo Sostenible 9: Industria, Innovación e Infraestructuras. Si nos percatamos -centrándonos en la innovación-, esta dimensión puede contribuir a todos los demás Objetivos de Desarrollo Sostenible: hambre, pobreza, empleo, género, educación, salud, energía, instituciones y alianzas.
Baste poner dos ejemplos: los programas de Big Data para la gestión y rastreo de los contagios y la potenciación de la educación digital durante el confinamiento. En el mundo empresarial, podemos citar la alianza entre Repsol y Google para la gestión tecnológica de la planta de producción petrolífera de Repsol en Tarragona-, mediante el uso de la inteligencia artificial y el Big Data. Este acuerdo tecnológico y sostenible es beneficioso ya que aumenta la eficacia, reduce costes y, además, minimiza riesgos en el refino de petróleo “downstream”. La digitalización es, por tanto, una herramienta esencial para el logro de la sostenibilidad.