Los planes de electrificación de Lexus son, cuanto menos, ambiciosos. La firma premium de Toyota espera lanzar 20 nuevos modelos de aquí a 2025, diez de ellos con algún tipo de tecnología eléctrica. Ese mismo año ofrecerá variantes electrificadas en toda su gama y se ha fijado 2050 como fecha tope para alcanzar la neutralidad de carbono como marca. El Lexus LF-Z Electrified es el concept car que sirve para escenificar este compromiso con el medio ambiente y la movilidad sostenible, al mismo tiempo que apuesta por un diseño único y sofisticado. Este prototipo aúna la visión de la firma en cuanto a prestaciones, diseño y tecnología. Detalles que van a estar presente en los próximos modelos, lanzados bajo el concepto de conducción ‘Lexus Driving Signature’.
Lexus apostó, en su momento, por la tecnología híbrida autorrecargable para los SUV’s premium, una decisión que le ha acarreado más de dos millones de unidades vendidas. La prioridad ahora es seguir avanzando hacia una sociedad libre de emisiones, tanto en el área híbrida como 100% eléctrica. Para conseguirlo es vital seguir innovando, como con la tecnología de tracción total DIRECT4 o la mejor optimización y colocación de las baterías. El objetivo de Lexus es alcanzar un rendimiento óptimo del vehículo gracias a la introducción de la electricidad, y no al revés. Ellos le llaman Lexus Driving Signature y tiene mucho que ver con sus raíces como fabricante y el lanzamiento de su primer coche.
El Lexus LF-Z Electrified parece esculpido para el futuro, con un atractivo intachable y los aires todocamino que tantos éxitos cosecha. Su interior recurre al diseño de cabina Tazuna, basado en alzar al conductor como el eje central de todo mediante la inteligencia artificial. El coche será capaz de mantener un diálogo natural con sus pasajeros, adaptándose a su comportamiento y proponiendo sugerencias de ruta, información interesante, seguridad e incluso conducción. Pese a tratarse de un prototipo, el LF-Z también introduce su propuesta mecánica, formada por un motor eléctrico de 400 kW (540 CV) de potencia y 700 Nm de par máximo. Datos que nos avanzan un futuro divertido y sostenible para Lexus.
El diseño del mañana
El Lexus LF-Z adelanta la evolución de la marca en el apartado de diseño. Tal como se muestra con este prototipo, la firma premium de Toyota buscará líneas más sencillas pero igualmente inconfundibles. Siguen apostando por una imagen poderosa y de proporciones notables, dignas de un todocamino premium y futurista.
Un todocamino grande
Es posible que no veamos jamás un LF-Z como modelo nuevo. Sin embargo, sí seremos testigos de su adaptación en futuros todocaminos de Lexus. La carrocería de este lienzo mide 4,88 metros de largo por 1,96 m de ancho y 1,66 m de alto, unas cotas que lo enmarcarían en el segmento D-SUV.
De la tecnología al diseño
La imagen del LF-Z tiene mucho que ver con la tecnología de la que es portado. Tal como explica la firma: “el diseño de este prototipo también se remite al rendimiento del sistema DIRECT4, con unos cambios continuos y dinámicos en la superficie de las puertas, desde delante hasta atrás”.
Doble punta
El LF-Z lleva el actual lenguaje de diseño al siguiente nivel, enfatizando la filosofía de “carrocería de doble punta” que ya vemos en modelos actuales como el UX 250h. La parrilla completamente opaca apenas tiene un par de detalles, pero son claves: el emblema lumínico Lexus en el centro, los afiladísimos grupos ópticos tridimensionales y los elementos decorativos oscuros, que recuerdan a las entradas de aire de todo buen deportivo.
Una silueta de infarto
Visto desde el lateral nadie puede poner en duda la belleza del LF-Z. Su forma depurada recuerda más a la de un coupé deportivo que la de un todocamino. La robustez ha dado paso a la sofisticación y la caída del techo en cola de pato nos hace desear que se haga realidad. Lamentablemente, muchos de los guiños estéticos no llegarán a los modelos de producción.
Nueva generación Lexus
Los arcos de las ruedas dejan atrás la típica forma cuadrada de los SUV actuales, formando parte de la visión en movimiento que genera el impacto de la luz en el LF-Z. La zaga es la parte más limpia de la carrocería, con una aleta de tiburón transparente de dimensiones considerables y el típico haz de luz horizontal del portón.
Placer de conducir
El habitáculo de este prototipo ha sido ideado para generar placer desde el primer momento. El nuevo concepto de cabina Tazuna implica al conductor como protagonista, como sucede con la relación que crean un caballo y su jinete. El objetivo es que el piloto pueda acceder fácilmente a los controles y la información que ofrece el coche, creando una sintonía casi natural.
El o la protagonista
Para que esta conexión sea completa, Lexus introduce la Inteligencia Artificial y la realidad aumentada. Esta tecnología está presente en la pantalla táctil multimedia y el cockpit, integradas en un único módulo central en el salpicadero y dirigidas hacia el protagonista. El resto de elementos, como son los asientos o los materiales utilizados, nos dan una pista de la afinidad de la firma por el minimalismo.
Inteligencia Artificial
La IA se hará cargo de adaptar su información, consejos y propuestas en función de los pasajeros presentes. Esta tecnología adoptará un papel activo y aprenderá de las preferencias del conductor, facilitando una relación mediante órdenes de voz naturales y sin comandos establecidos. Tampoco podemos pasar por alto la instalación de un equipo de sonido Mark Levinson de última generación, dispuesto para el disfrute de todos los presentes.
Propulsión eléctrica
El propio nombre del LF-Z Electrified nos adelanta su propulsión eléctrica. La firma anuncia una potencia de 400 kW, que suponen más de 540 CV, y 700 Nm capaces de firmar un 0 a 100 km/h sobre los 3 segundos. Un dato sorprendente para un coche que superará las 2 toneladas de peso.
Las baterías deben mejorar
El principal escollo de los vehículos eléctricos, a día de hoy, son las baterías. Este elemento imprescindible para los cero emisiones sigue siendo muy pesado y grande. En este caso, el LF-Z montaría una batería de iones de litio de 90 kWh de capacidad refrigerada por líquido y que otorgaría hasta 600 kilómetros de autonomía. Se podría cargar hasta 150 kW.
Tracción integral DIRECT4
Una de las claves de este prototipo es su recolocación de las baterías, motores y sistema de tracción total. El DIRECT4 permite repartir el par del motor eléctrico a cada rueda de forma individual, por lo que modifica del comportamiento del vehículo en función de las necesidades de adherencia. Este sistema no recurre a ninguna conexión mecánica, como tampoco lo hace la dirección de tipo by-wire.
RECIBE CADA SEMANA LAS NEWSLETTERS DE MUY INTERESANTE