La magia de la telemetría en el Alpine
En este artículo hablamos con los técnicos e ingenieros del equipo Alpine Elf Matmut Endurance Team para que nos explique cómo funciona la telemetría del Alpine A480.
Desde Muy Interesante no nos cansamos de recordaros lo importante que es la competición en el desarrollo de las tecnologías de la automoción. Los sistemas que hoy nos salvan en una frenada, como el ABS, o estabilizan el coche en plena curva, ESP, se extrajeron en su momento de las carreras. Poco a poco se han perfeccionado hasta conseguir unos vehículos de producción más eficaces, fáciles de conducir y, sobre todo, rápidos sin ser inseguros. Pero la experimentación en pista va mucho más allá de la pura conducción, también nos ha traído los sensores, cámaras y radares que hoy en día utilizamos para conectar nuestro vehículo con la red e incluso nuestro smartphone. Lo que vendría a ser la telemetría de la que hemos querido hablar con los ingenieros y técnicos del equipo Alpine Elf Matmut Endurance Team.
Cuando el Alpine A480 se prepara para una carrera del Campeonato del Mundo de Resistencia (WEC) deben tenerse muchos parámetros en cuenta. Le Mans, el mítico trazado francés de las 24 Horas, mide más de 13 kilómetros y, a pesar de la distancia, la escudería recibe información de todo lo que sucede a bordo de manera continua. Se trata de la categoría Hypercar y, más allá de la calidad de sus pilotos y la mecánica, los datos pasan a ser claves para la victoria.

Alpine
En el box de Alpine
Los equipos del WEC, como también sucede en MotoGP o la Fórmula E, trabajan como si fueran una única persona. Su coordinación es apabullante y más aún si tenemos en mente el caos de un box, con la presión del tiempo sobre sus espaldas y todo su avituallamiento a mano. Tras las mamparas, los carros llenos de herramientas y los neumáticos se encuentra la zona de las pantallas, escondida de los ojos avispados de reporteros para estudiar y jugar con los números.
Hablamos con Thomas Tribotté, ingeniero de explotación Alpine Elf Matmut Endurance Team para que nos descubra los entresijos de este apartado del equipo que, como él mismo reconoce: “En la categoría Hypercar, la carrera no transcurre sin más, sino que se gestiona con una impresionante cantidad de datos”. En la escudería Alpine Elf Matmut Endurance Team tienen como protagonista a un A480, que participa de nuevo en la categoría reina de la resistencia.
Para mejorar su puesta a punto en la LMP2, la categoría inferior, trabajaban con 200 parámetros que estudiar. “Ahora, en Hypercar, esta cifra ha pasado a 500. Este sistema de telemetría nos envía entre 2000 y 2500 datos de manera continua. Para seleccionarlos y analizarlos, somos ocho ingenieros en el stand. Cada uno se encarga de una parte del coche. Por ejemplo, hay dos ingenieros del motor que vigilan la gestión de la potencia, primordial en Hypercar” nos explica Tribotté.

Alpine
Victorias por datos
La vigilancia de los datos es clave para conseguir la victoria, tanto en el Endurance como en los Rallies o la Fórmula 1. Esta información se clasifica en categorías y, en el equipo Alpine, se dividen del siguiente modo: “En primer lugar, están los que se refieren a la fiabilidad con, en particular, las temperaturas de los frenos, del motor, de la caja de velocidades y la presión de los neumáticos. Para estos datos más esenciales, hemos configurado alertas. Algunas se activan incluso directamente en el coche y están destinadas al piloto”, explica Thomas Tribotté.
Su relevancia quedó clara en una de las ediciones de las 24 Horas de Le Mans con el LMP2. “Detectamos un problema técnico...pero gracias a la telemetría pudimos gestionar la avería y esperar el momento más oportuno para reparar, y fue durante una neutralización. Al final, aun así salimos vencedores de la categoría LMP2”. Preguntado sobre los retos para la próxima temporada, en la categoría reina, se centrarán en explotar la cantidad de carburante a bordo optimizando su repostaje.